A pesar de ser la decimoquinta economía más grande del mundo y ocupar el mismo lugar como exportador global, el auge comercial de México solo se concentra en cinco entidades: Chihuahua, Coahuila, Baja California, Campeche y Nuevo León, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Además, aunque es uno de los 20 países más atractivos para la inversión extranjera, la actividad comercial se centra en unas cuantas industrias, cuyos productos tienen un contenido nacional de 35% en promedio, según estimaciones del gobierno.

Por ello, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) considera que las inversiones que realizan las empresas manufactureras mexicanas no son de alto valor agregado.

Datos oficiales revelan que las exportaciones mexicanas se concentran en los segmentos automotriz, electrónico, eléctrico y aeroespacial, y en su gran mayoría lograron su desarrollo bajo el esquema maquilador.

En contraste, para el coordinador del Laboratorio de Análisis de Comercio Exterior del Centro de Relaciones Internacionales de la UNAM José Ignacio Martínez Cortés la investigación, el desarrollo, la innovación y el diseño tecnológico son rubros que no se desarrollan en el país.

“Con el esquema de maquila no se desarrollaron marcas mexicanas, como sucedió en Corea, que de ser un país ensamblador se convirtió en una economía innovadora que ya posicionó a sus empresas” como LG y Samsung, dijo el director de la Asociación Nacional de Importadores y Exportadores de la República Mexicana (ANIERM), Luis Enrique Zavala.

Lo que sí sucedió es que se atrajo la inversión de las grandes empresas, sobre todo del sector automotriz, las cuales ya tienen plantas en el país.

“Pero hay una gran labor por hacer para que sean los mexicanos los que desarrollen las patentes y construyan los grandes microcomponentes, para que no nos pase lo que sucede con China, que aun cuando fabrican celulares ellos solamente se quedan con seis dólares del precio al que se vende, mientras que la firma alemana que los diseñó recibe 30 dólares”, explicó el presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), Manuel Herrera Vega.

Según la Organización Mundial del Comercio (OMC) y la Cepal, México tiene una gran dependencia de las importaciones para exportar.

En su mayoría importa bienes intermedios como partes y componentes de diversos países como Estados Unidos y de asiáticos como China.

Tan es así que el valor agregado nacional de las exportaciones es bajo. Para la fabricación de equipos de transporte (automóviles) es de 32.4%, de electrónicos, 14.3%, y de equipos eléctricos, 7.4%, según el estudio Valor agregado en las exportaciones manufactureras, de Gerardo Fujii y Rosario Cervantes, de la Cepal.

Para el gobierno federal, en promedio en México el valor agregado es de 35% de lo que se exporta, “un salto cuántico de lo que ocurría hace 30 años con el Decreto Automotriz, con el cual sólo ensamblábamos partes y no participábamos en el diseño e incorporación de valor”, explicó el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo.

El funcionario aseguró que trabajan para elevar el contenido nacional de los diversos productos, tal como se ha visto en la industria automotriz, en donde se podría llegar hasta 60% o 65% de integración de valor.

La apertura que dio el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), dijo Martínez Cortés, provocó un cambio profundo en la estructura industrial de México que se refleja en el sector manufacturero, ya que se incorpora mayor valor agregado tecnológico a las exportaciones, solo que no se ha desarrollado una economía del conocimiento nacional.

Y aunque el desarrollo se observa en los segmentos automotriz, electrónico y aeroespacial, las empresas de estos giros aprovechan la figura fiscal de empresa maquiladora para importar, transformar y exportar, siendo el contenido nacional alrededor de 9% del total manufacturero exportado, resultado de que la investigación, desarrollo, innovación y diseño tecnológicos no se realizan en el país.

Además, si bien las exportaciones manufactureras generan 30% del PIB de México, son cinco entidades las que se vuelcan en esa actividad: Chihuahua, Coahuila, Baja California, Campeche y Nuevo León, las cuales dependen de los pedidos manufactureros de Estados Unidos. En el caso particular de Campeche, las exportaciones petroleras son la principal fuente de ventas al exterior.

Sin embargo, esta concentración y la dependencia de las ventas a Estados Unidos son un foco de atención, ya que si ese país llega a tener una crisis podría generar desempleo en esas entidades, dijo el académico de la UNAM.

Actualmente, hay 5.1 millones de unidades económicas en el país, de las cuales 37 mil (0.7%) se dedican a la exportación, aseguró Martínez Cortés.

El TLCAN fue puntal para el desarrollo económico, pero no consideró el desarrollo local, no hay políticas para incorporar a las pequeñas y medianas empresa como proveedores de las grandes, porque no existe una banca de desarrollo que las impulse ni apoyos reales, explicó Zavala.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses