Vaya forma de conocer la Ciudad de México para el piloto holandés de la escudería Red Bull, Max Verstappen , innovando en su traslado hoy al Autódromo Hermanos Rodríguez .

Tomar un microbus por la mañana en pleno paseo de la Reforma ya no sólo es parte de la rutina de los capitalinos. Sin pensarlo, Max Verstappen , le hizo la parada a un colectivo en el que acompañado por el campeón de la European Le Mans Series, Memo Rojas Jr, y el luchador Carístico , viajaron en la ruta Reforma-Autódromo Hermanos Rodríguez.

No había mejor forma de conocer la CDMX, que arriba del transporte colectivo, con los típicos vidrios rayados, y los asientos a punto de caerse; Verstappen subió sin pagar pasaje y se acomodó en la parte delantera del camión que lo llevó al inmueble en la Madgalena Mixhuca.

El camino de Reforma al Oriente de la Ciudad de México es largo y como Verstappen tenía que vivir lo que es el tráfico en la capital del país, el holandés y su equipo de trabajo, se dieron tiempo para probar en un servicio VIP arriba de la unidad, los ricos tacos de canasta que hacen famosa la gastronomía mexicana.

Las salsas y cumbias del chofer, fueron remplazadas por el sonido del mariachi mexicano, quienes sin duda cambiaron el pedir “lo que sea su voluntad” por una foto y la experiencia de tocar para uno de los mejores pilotos en la máxima categoría del automovilismo.

“Toques, toques”, comenzó a sonar dentro del 'micro', y Max Verstappen vivió el tipo de adrenalina que no se siente a más de 300 kilómetros por hora en un monoplaza. De la mano de Carístico y Memo Rojas, Max sintió la intensidad de la muy mexicana 'máquina de toques', al borde de los nervios y las risas, Verstappen no contuvo la emoción.

Llegó la parada final, el Autódromo Hermanos Rodríguez lo esperaba para la conferencia de prensa previo al Gran Premio de México, en que el piloto de Red Bull parte como uno de los favoritos para estar en el podium del Foro Sol el próximo domingo.

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