La codependencia es un término relativamente nuevo de la psicología para definir a las personas que dependen de otras y sus acciones para sentirse bien emocionalmente. Es cierto que todxs necesitamos de otrxs en determinado momento, o nos dejamos afectar por acciones externas para bien y para mal. No lo podemos evitar, es parte de ser humanx y de las relaciones, pero el problema es cuando basamos la existencia propia en la existencia de otrxs.
No hay cosa más efímera que el estado de ánimo de alguien, y lxs codependientes están enganchados precisamente al estado de ánimo de ciertas personas a su alrededor. No a todxs, aunque sus conductas sí podrían llevar dosis de control, pero hay ciertas relaciones que les generan más dependencia que otras. Su bienestar, estado de ánimo, paz mental, felicidad, alegría o miseria dependen de que lxs demás pongan buena cara.
La manera en que las personas codependientes “consumen” es creyendo que si su entorno está bien ellxs estarán bien también. Esto generaría una dinámica muy buena si sus acciones fueran desinteresadas y libres de control, pero no es así. En esta necesidad por ser aceptadxs buscan compulsivamente complacer y satisfacer las necesidades ( o lo que creen que son) de las personas que lxs rodean. Cuando son rechazadas o simplemente las personas alrededor no les hacen caso a pesar de sus múltiples intentos por complacerlos, ellxs comienzan a acumular resentimiento en secreto. Una particularidad de la codependencia es que estos resentimientos y enojos no se exteriorizan por miedo a causar rechazo. Es más, no lo perciben y podrían tardar años en darse cuenta del enorme resentimiento que le guardan a esa persona porque no es o no hace lo que ellxs quieren. Mientras se dan cuenta, manifiestan su enojo a sus espaldas, juzgándolxs, jugando a ser víctimas, y creando un mundo paralelo de suposiciones.
En parte lo que puede originar que una persona se vuelva codependiente es la educación que recibe, complementada con una cultura que no procura la autoestima. La baja autoestima permea y hace creer que no se es merecdxr de la felicidad por nuestros propios medios sino por fuerza a través de alguien. La baja autoestima nos impide hacernos responsables de nuestros asuntos emocionales y por lo mismo buscamos quién lo haga. Es mucho más fácil culpar o responsabilizar al entorno de lo que pasa, que tomar las riendas del presente.
La recuperación de la codependencia consiste en hacerse responsable de la vida propia y buscar ayuda para hacer conciencia de los comportamientos que llevan siempre a topar con pared y al sufrimiento. Soltar el control, ser honestx y hacerse responsable.
Trabajar en la autoestima para sentir merecer y crearse una vida para no vivir la de los demás.
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