“Más vale llegar temprano porque seguro va a haber mucha gente”,

dice Sofía Jiménez mientras espera en la fila para entrar a la Residencia Oficial de Los Pinos . A las 9:30 de la mañana, 30 minutos antes de que se abrieran las puertas, entre 150 y 200 personas ya estaban formadas para ser los primeros en ingresar.

En el segundo día que Los Pinos está abierto al público

, personal del lugar prevé que debido al paseo dominical hoy se registre el doble de visitantes que ayer, que fue de 30 mil personas.

Familias completas, grupos de jóvenes y personas de todas las edades llegaron hasta este lugar con curiosidad de conocer cómo vivían los ex mandatarios.

En la Calzada de los Presidentes , una mamá le explicaba a su hijo, de aproximadamente seis años, los principales logros de cada mandatario, así como el periodo en el que gobernaron.

En la Casa Miguel Alemán , la gente aprovecha para tomarse selfies en las escaleras centrales que tienen un gran ventanal al fondo.

“¿Y los muebles?”

, cuestiona Paola Rodríguez al salir de la recámara presidencial, que de acuerdo con los letreros, fue ocupada por última vez por el presidente Ernesto Zedillo.

“Está padre, pero dónde están los muebles, venir a ver cuartos solos no está tan chido”

, dice esta joven, quien visita el lugar con sus papás para conocer el estilo de vida de los ex presidentes.

En la planta baja de esa casa, una mujer interpreta una pieza de ópera, mientras que alguien la acompaña en el piano. La gente clama “bravo” y rompe en aplausos cuando termina.

Jorge Flores y Antonina Gutiérrez disfrutaron atentos la interpretación, “está precioso”, dice ella emocionada, y destacan que los eventos culturales que se están realizando en el lugar son como la cereza del pastel de la visita.

Para Jorge, la apertura a todos de la Residencia Oficial de Los Pinos “es una bonita medida del nuevo presidente para que veamos qué tipo de ostentación tenían los anteriores presidentes y el pueblo pues estaba bien jodido” .

Añade que hay una excelente organización para los visitantes, “no hay desorden, todos siguen las instrucciones”.

A un lado de la Casa Lázaro Cárdenas, una orquesta de niños interpreta Uptown Funk , de Mark Ronson y Bruno Mars , entre otras melodías que alegran a los visitantes.

En el interior de la casa, Pedro Sánchez sonríe mientras le toman una fotografía con el Escudo Nacional que abajo tiene el mensaje “Presidencia de la República” .

Asistió a Los Pinos por curiosidad, para ver “todo lo que hay, lo que desconocíamos” . Por eso agradeció al presidente Andrés Manuel López Obrador la oportunidad que le está dando a los mexicanos de ver la parte de la historia del país que antes estaba escondida tras las paredes de la residencia, en la que habitaron 14 ex presidentes.

Al mediodía, la afluencia de visitantes era mayor, los niños corrían en los jardines bajo el rayo del sol y los adultos disfrutaban del ambiente festivo que se siente en todos los espacios.

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