Ciudad de México.- Pablo Becerra, profesor de la división de Ciencias Sociales de la UAM Iztapalapa del departamento de Sociología simplemente ha dejado de contestar el teléfono: si el número es desconocido, no toma la llamada porque ya se cansó del hostigamiento de los bancos.

Durante estos 40 días de huelga en la universidad, no ha cobrado su sueldo pero sigue viviendo: está endeudadísimo. 

"Personalmente, he tenido que pedir prestado y a mis familiares porque no tenía contemplado un fondo de ahorro suficiente para enfrentar los 40 días de huelga. Lo que tenía me alcanzó para febrero y ya", dijo.

Pablo Becerra, profesor de Sociología, es uno de los decenas de maestros y estudiantes que hoy se manifestaron nuevamente para demandar el reinicio de actividades en la casa de estudios metropolitana.

Al grito de "¡Clases sí, huelga no!" y "UAM abierta ya"

decenas de maestros y estudiantes de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) se manifiestan frente al Palacio de Bellas Artes para demandar el fin de la huelga en la institución, que lleva 40 días. 

Si bien comprenden que la huelga y las demandas de los trabajadores son legales , consideran que la huelga es "inmoral" por las afectaciones que está teniendo la comunidad en materia de acceso a becas y apoyos alimentarios para los estudiantes, que los maestros y trabajadores han dejado de cobrar sus salarios y, sobretodo, que el trabajo de investigación científica está detenido.

Con carteles como "Me canso Ganso, UAM abierta ya", "La huelga no es ilegal pero es inmoral", y "Extraño dar clases y a mis alumnos" profesores y alumnos, indicaron que la huelga es ilegítima al señalar que se decidió a través de un sistema de votación por delegados y que el SITUAM no ha convocado ni informado de sus acciones a los profesores y académicos por lo que consideran que esta huelga, "solo defiende a los administrativos".

"La huelga tiene un objetivo insostenible. Pretender incrementar el salario en 20% es inverosímil porque los recursos de la universidad son fijos y pretender que el rector recortara sus ingresos para no ganar más que el presidente es ilusorio porque él fue el único que decidió no reducir su sobresueldo. Si él no lo hace, mucho menos lo harán los trabajadores de confianza que perciben un sobresueldo", señalaron en la manifestación que se celebró en la explanada del Palacio de Bellas Artes.

Demandaron que la huelga frena el trabajo académico y altera el proceso de formación profesional de los estudiantes, y que el sindicato cuenta con el doble de trabajadores administrativos sobre académicos.

Nuevamente, el proceso de negociación de la huelga se suspendió el lunes puesto luego de que los integrantes del Sindicato de Trabajadores de la UAM no aceptaran la propuesta de la rectoría general para avanzar en la resolución del problema.

La rectoría propuso incrementar el número de plazas, limitar las contrataciones de personal de confianza y en un nuevo documento, incrementar las percepciones por vales de despensa pero los trabajadores señalaron que la demanda es para resolver a violaciones al contrato colectivo y por un incremento salarial directo.

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