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En una votación “planchada, por 37 sufragios a favor, uno en contra y una abstención, Jaime Rodríguez Calderón recibió licencia para ausentarse del cargo de gobernador por un periodo de seis meses, a partir de 1 de enero, a fin de ocuparse de tiempo completo a la campaña como aspirante presidencial como independiente.
En la misma sesión, y pese a señalar que el mandatario estatal no tiene atribuciones para proponer como gobernador interino al secretario General de Gobierno, Manuel González Flores, los diputados de todas las bancadas hicieron suya la propuesta, en voz del priísta, Héctor García, y lo designaron para suplir temporalmente a Rodríguez Calderón en votación secreta a través de cédula, por 41 votos a favor, cero en contra y cero abstenciones.
La sesión se vio envuelta en un áspero debate donde Samuel García, de Movimiento Ciudadano, responsabilizó a quienes avalaran la licencia de ser cómplices de la traición que Jaime Rodríguez cometería contra más de un millón de electores que lo hicieron gobernador por seis años y ahora pretende chapulinear.
Expuso García: “No quiero ser cómplice, ni que se me acuse de traicionar al pueblo de Nuevo León, o se me reclame porque el estado se encuentre destruido por quedarse sin cabeza. Esta acción es la estocada final a los verdaderos independientes de México”.
Su compañera de bancada, Mariela Saldívar, votó en abstención, y dijo que Jaime Rodríguez tiene legítimo derecho de buscar la presidencia.
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