Mérida, Yuc.— “Santa Lucía”, afirmó, enfático, el presidente Andrés Manuel López Obrador al capitán Rafael Bolio, del vuelo 533 de Aeroméxico, quien le pidió considerar de nuevo a Texcoco como la opción para construir el nuevo aeropuerto.

Tras el aterrizaje de la aeronave, el capitán esperó afuera de la cabina al Mandatario.

Luego de darse un apretón de manos, López Obrador sentenció: “Santa Lucía”. “Ah, muy bien”, contestó el capitán.

Al abordar el vuelo con destino a Mérida, Yucatán, Rafael Bolio le dio la bienvenida al Ejecutivo y le dijo que ojalá lo pudiera convencer para que construya el aeropuerto en Texcoco, Estado de México.

“Bienvenido, Presidente, ojalá lo podamos convencer [para] que haga el aeropuerto en Texcoco”, señalo el capitán por el altavoz de la aeronave, acción que fue celebrada por algunos de los pasajeros.

El gobierno actual decidió cancelar la obra en Texcoco porque el terreno se hunde, por el costo y por los presuntos casos de corrupción con los que inició.

Tras un conflicto legal de seis meses con organizaciones de la sociedad civil, la administración federal comenzó la construcción del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles en la base militar de Santa Lucía, Estado de México.

El Presidente viajó a Mérida para luego a trasladarse por carretera a Tekax como parte de su gira de trabajo y encuentro con pueblos mayas de la península.

Ahí, ante el pueblo maya, López Obrador recibió del sacerdote Virgilio Dzul una ceremonia tradicional, en la que se le pidió a la madre tierra que ilumine el camino del Ejecutivo en su tarea de gobernar obedeciendo al pueblo.

En su mensaje, López Obrador pidió “tener fe” en que su gobierno logrará que las cosas mejoren: “No es una cosa fácil, fueron muchos años de saqueo, pillaje, abusos, indolencia, se abandonó al pueblo y las autoridades se dedicaron a robar. El problema de la inseguridad y la violencia es fruto podrido de esa política de abandono al pueblo”.

Ante el reclamo de ciudadanos y autoridades mayas de que el hospital de Tekax no tiene médicos ni medicinas, el Presidente se comprometió a que el 15 de enero de 2020 el lugar contará con el personal necesario.

Juan Antonio Ferrer, director del Instituto para la Salud del Bienestar, expuso que a partir de esa fecha tendrán contratadas 437 nuevas plazas, de las cuales 101 van a ser médicos; 167, enfermeras, y 169 va a ser personal de diagnóstico para cuatro o cinco especialidades.

En su oportunidad, el gobernador Mauricio Vila respaldó a López Obrador en su tarea de mejorar las condiciones de vida: “Para acabar con la corrupción (...) cuenta no solamente con el apoyo del gobernador de Yucatán, sino con el del pueblo del estado”.

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