Las bancadas del Senado, con excepción de Movimiento Ciudadano (MC) y del Partido del Trabajo (PT), se pronunciaron en apoyo de su reforma a la Ley del Banco de México (Banxico) del miércoles 9, la cual rechaza, de manera contundente, la Junta de Gobierno de ese órgano autónomo, y establecieron que estarán atentos a la revisión que la Cámara de Diputados lleve a cabo y si con ello favorecen la situación del pueblo.

Por medio de un comunicado, los grupos de Morena, PAN, PRI, PVEM, PRD y PES indicaron que “estaremos atentos al proceso legislativo que se está desarrollando y, si fuere el caso, recibiremos abiertamente las modificaciones que la colegisladora [Cámara Baja] llegase a considerar viables o las que pudiera incorporar el Ejecutivo”.

El gobernador del Banxico, Alejandro Díaz de León Carrillo, desde la aprobación en comisiones del Senado de la reforma a la Ley del Banco de México en materia de captación de divisas, estableció su postura en contra, porque las modificaciones vulneran la autonomía de la institución y abre riesgos de lavado de dinero.

A la par, se indicó que con las nuevas disposiciones se podrían comprometer las reservas internacionales en alguna investigación de lavado de dinero, y esta advertencia fue compartida por entidades monetarias y analistas del sector.

El viernes 11 Díaz de León compareció ante la Comisión de Hacienda de San Lázaro, donde la minuta llegó para estudio y dictamen, y allí reiteró sus puntos de vista, a lo que el panista José Isabel Trejo comentó que retomaba sus planteamientos y los estudiaría con los de otros organismos.

Ayer sábado, el líder de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, emitió una ficha informativa en la que expuso que al banco central “no se le impone ninguna obligación” con la reforma para el manejo de divisas.

Monreal señaló que no se modifican las funciones operativas del banco, “ni se promueve la realización de operaciones activas de alto riesgo que pueden comprometer la disponibilidad de los activos internacionales en reserva y el cumplimiento del mandato constitucional de preservar el valor adquisitivo de la moneda nacional”.

Expuso que “aunque se establecen pautas mínimas a observarse, queda a criterio de ese órgano constitucional autónomo [el Banco de México] la forma en que se implementarán las reformas, en observancia de parámetros de seguridad, certeza y transparencia”.

Por la tarde, en un comunicado en el que la oposición —incluido el Partido Acción Nacional (PAN), que votó en contra y con cuatro abstenciones—, se estableció que la reforma es benéfica para la población que recibe dólares.

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