Grupo Plural se reserva derecho de admisión

El nuevo Grupo Plural del Senado de la República tiene las puertas abiertas a la incorporación de más legisladores que quieran sumarse a las causas que enarbola; sin embargo, se reserva su derecho de admisión, advirtió su coordinador, Germán Martínez Cázares.

En entrevista con EL UNIVERSAL, el exlegislador de Morena dejó claro que no cualquiera podría integrarse al Grupo Plural, que por ahora está conformado por cinco senadores.

“Por supuesto que sí, están abiertas las puertas del Grupo Plural y nos reservamos el derecho de admisión, las dos cosas juntas. Las puertas abiertas del grupo para todas las senadoras y todos los senadores, y es cierto, nos reservamos el derecho de admisión. No buscamos lastimar a ningún grupo parlamentario, no buscamos la confrontación con nadie, buscamos el acercamiento con todos”.

El exdirector del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) puntualizó que entre las características de quienes deseen pertenecer al Grupo Plural están abrazar la libertad de conciencia, como Zarco, la libertad de expresión, “que favorece a los periodistas y a nosotros”, y la libertad de asociación.

“Esa es la única condición, la única característica que [se] necesita para ser senador del Grupo Plural. No necesitan ningún otro requisito. Que quieran ser libres, que no tengan dueño, que no sean de los factores reales del poder, que no vengan aquí a ver qué jefe de partido dice o a buscar la mirada a Palacio Nacional, o a buscar la mirada a los líderes parlamentarios para votar. No, ejercer la libertad absoluta y sólo mirar al pueblo y a la gente y a la conciencia para votar”.

El Grupo Plural hizo su aparición pública el 28 de septiembre, integrado por las senadoras Nancy de la Sierra Arámburo y Alejandra León Gastélum, que pertenecían a la bancada del PT, y los senadores Germán Martínez Cázares, que renunció al grupo de Morena; Gustavo Madero Muñoz, que formaba parte de la bancada del PAN, y Emilio Álvarez Icaza Longoria, que hasta entonces era el único senador sin partido.