Nueva York.— El muro que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quiere construir en la frontera con México “es una decisión más de política interna de Estados Unidos”, aseguró ayer el embajador de nuestro país ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Juan Ramón de la Fuente, tras presentar sus cartas credenciales ante el secretario general del organismo internacional, António Guterres.

La ceremonia de presentación tuvo lugar en la oficina del secretario general, en la sede de Naciones Unidas, en Nueva York, donde posteriormente se llevó a cabo una reunión entre el embajador De la Fuente y António Guterres, según informó la Secretaría de Relaciones Exteriores de México a través de un comunicado.

Al concluir, el embajador mexicano tuvo un encuentro con la prensa, donde señaló que “México desea construir una relación renovada y de mayor coordinación con la ONU”, y destacó el deseo de colaborar con la Agenda 2030 y otros temas relevantes tanto para el país como para la ONU.

A pregunta expresa de la prensa, también se refirió al tema del muro. Al respecto, De la Fuente Ramírez dijo: “La política interna de Estados Unidos nos merece el mayor de los respetos. Podemos o no estar de acuerdo con ella, pero es su política”.

Indicó que si se concreta la construcción de un muro “como resultado de esa decisión política de Estados unidos”, México lo respetará “sin que eso quiera decir que estamos de acuerdo. Nuestra propia política no está de acuerdo, nuestro Congreso no está de acuerdo, pero tenemos que entender que en la relación hay acciones que se toman de un lado y que no necesariamente tienen un acuerdo correspondiente del otro lado”, expuso el embajador.

Consideró que la solución a los muchos problemas fronterizos “está más en el lado de lo que se ha venido trabajando con Naciones Unidas” y agregó que hay formas más eficientes para un control migratorio más amplio que la construcción de un muro.

Postura ante Venezuela. El embajador Juan Ramón de la Fuente también fue cuestionado sobre la postura de México con respecto a la situación en Venezuela y sobre el particular reiteró que la posición de México se apega a la Constitución y se basa en el principio de la no intervención y la búsqueda de solución pacífica a los conflictos, “dejando a cada país en plena libertad para su propia autodeterminación”, e insistió en que sigue presente la posibilidad del diálogo.

“La posición de México es que no toma deliberadamente un lado o el otro, pero sí está en el ánimo de coad-yuvar para facilitar la búsqueda de soluciones por la vía pacífica, y una de ellas es el diálogo”, afirmó.

Resaltó que México nunca verá con simpatía una intervención militar en ningún país, “menos lo vería en el caso de Venezuela”, por lo que hizo un llamado al diálogo. “Es importante abrir alguna vía. No creo que podamos seguir diciendo que está agotada la vía del diálogo; éste nunca se agota, a menos que alguien no quiera dialogar. Debe ser una opción”.

El embajador señaló que son los venezolanos quienes deben “encontrar la mejor manera de reorganizar lo que sea que deban reorganizar en su país”.

En cuanto a la ayuda humanitaria que recibe Venezuela, comentó que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador no se opone a este tipo de entrega y recalcó que en estos momentos nuestro país está dando una lección puesto que brinda atención a los migrantes que buscan llegar a Estados Unidos.

“En estos momentos México da lecciones al mundo con los migrantes que están en el país en espera de ser atendidos por las autoridades estadounidenses. Les estamos brindando la ayuda humanitaria que se merecen, así que la ayuda humanitaria no tiene por qué entrar a discusión”, dijo el también exrector de la UNAM.

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