Washington. Estados Unidos concluyó ayer la primera fase del “Proyecto Pitón”, un operativo masivo que tiene por objetivo descabezar el entramado delictivo del (CJNG) en el país y que consiguió el arresto de más de 750 miembros del grupo, además de la incautación de más de 20 toneladas de droga (la mayoría, 15 toneladas, metanfetaminas) y dinero por valor superior a los 22 millones de dólares.

“El Proyecto Pitón es la acción más integral hasta la fecha en la campaña del departamento de Justicia para alterar, desmantelar y finalmente destruir el CJNG”, aseguró en rueda de prensa Brian Benczkowski, titular del departamento criminal del Departamento de Justicia de los EU.

Ha sido una operación de seis meses que terminó en la madrugada del miércoles, cuando se realizó el golpe final. Solo ayer, las autoridades estadounidenses capturó a 250 operadores y decomisaron 600 kilos de droga y 1. 7 millones de dólares.

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No se trata sin embargo de un plan unidireccional, ya que también se está atacando el tráfico de armas desde Estados Unidos a México. Entre las investigaciones también se frenó el mes pasado, el intento de miembros del cártel de comprar 200 rifles de asalto y explosivos en California con el objetivo para contrabandearlos dentro del país.

“(El Proyecto Pitón) es una de las acciones concentradas más grandes contra una única organización criminal en muchos años”, aseguró Uttam Dhillon, director interino de la Agencia Antinarcórticos (DEA) de los Estados Unidos, “y subraya el compromiso (de la DEA) de proteger a los estadounidenses, borrando a miembros de nivel alto y medio y limitando la capacidad del CJNG de regenerarse y continuar amenazando nuestras comunidades con sus drogas mortíferas”.

Ninguno de los dos funcionarios quiso detallar la nacionalidad de los detenidos, más allá de decir que se trata de mandos medios y altos del cártel en Estados Unidos y que confían que hayan causado un “daño significativo” al organigrama.

“La DEA no parará hasta que esta peligrosa organización esté totalmente destruida”, prometió Dhillon, quien repitió en más de una ocasión el compromiso “incansable” de la DEA contra el CJNG, que se demostrará con la segunda fase del Proyecto Pitón, que inicia de forma inmediata y se nutrirá de la información recabada en los últimos seis meses.

Benczkowski y Dhillon hicieron el anuncio flanqueados por el cartel que anuncia la recompensa de 10 millones de dólares por información que lleve a la captura del , precio que se le puso a la cabeza del líder del CJNG en octubre de 2018.

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Con entre rejas, Dhillon confesó que uno de los principales “prioridades” de las autoridades de la Unión Americana es “El Mencho”. Para Benczkowski, el cártel es “uno de los más poderosos operando en los EU”, con centros de distribución en Los Ángeles, Nueva York, Chicago, Houston y Atlanta; el “mejor armado de México”; con los mayores laboratorios de metanfetaminas en el país; y responsable de “actos macabros de violencia y pérdida de vidas”.

“Son unos de los más prolíficos narcotraficantes en el mundo”, añadió Dhillon.

El cerco al círculo del líder del CJNG es cada vez más estrecho, aprisionando como una serpiente pitón haría a su presa. Además de la operación antinarcóticos, en la capital están esperando juicio dos de sus hijos, Rubén Oseguera “Menchito” y Jessica Oseguera “La Negra”.

Por si fuera poco, el Departamento del Tesoro añadió a su lista negra cuatro empresas más, acusadas de servir de tapadera del cártel para lavar dinero ilícito.

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