Washington.— El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, cumplió su promesa y abandonó ayer el pacto nuclear multilateral con Irán. El magnate llevaba meses advirtiendo que sin cambios sustantivos en el “desastroso” y “vergonzoso” acuerdo, no le quedaría otra que retirarse de él y volver a aplicar las sanciones “de alto nivel” contra el régimen iraní, que respondió de inmediato y declaró que no saldrá del convenio.

“En el corazón del acuerdo con Irán estaba la gigantesca ficción de que el régimen asesino [iraní] quería sólo un programa de energía nuclear pacífico”, aseguró Trump. En su opinión, eso era “una mentira”, porque su objetivo real era seguir manteniendo la capacidad de armarse mientras se mantenía como “el mayor patrocinador mundial del terrorismo”.

De forma inmediata, Estados Unidos vuelve a aplicar sanciones económicas contra Teherán, especialmente contra los sectores financieros y energéticos. Una de las voces que más mostró su desacuerdo fue el ex presidente Barack Obama, quien vio una vez más cómo su sucesor se dedica casi en exclusiva a destruir su legado. “Es un error muy serio”, señaló el ex mandatario, poco dado a expresar su opinión desde que abandonó la Casa Blanca.

La decisión del millonario fue adoptada a pesar de los reiterados llamados a no retirarse del acuerdo que le habían sido formulados por Francia, Alemania o Reino Unido, que son firmantes del pacto.

El presidente iraní, Hassan Rouhani, dijo que mantendrá conversaciones con Rusia, China y los tres países europeos que suscribieron el documento. Mencionó que podría reanudar el enriquecimiento de uranio “sin límites”.

En un mensaje difundido por la televisión estatal, Rouhani calificó como “guerra sicológica” la decisión de Washington. Señaló que su país respetó todos sus compromisos. “Desde ahora, el acuerdo nuclear es entre Irán y cinco países”, indicó Rouhani. “Debemos esperar para ver qué harán estas cinco grandes naciones”.

La jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, lamentó la decisión estadounidense. Dijo que el bloque europeo está “determinado a preservar” el acuerdo.

En un mensaje en Twitter, el presidente francés, Emmanuel Macron, señaló que “Francia, Alemania y Reino Unido lamentan la decisión estadounidense”, y añadió que esos tres países van a trabajar “colectivamente” en favor de un acuerdo “más amplio”. Esos tres gobiernos emitieron una nota conjunta en la que apuntaron que “permanecen comprometidos a asegurar que el acuerdo es respetado”. Rusia se mostró “profundamente decepcionado” por la decisión de Estados Unidos.

En contrapartida, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, dijo en un mensaje televisado que su gobierno apoyaba “totalmente” el gesto “valiente” de Trump. Además, pidió a la comunidad internacional que se retire del pacto y emita nuevas sanciones contra el país persa para “frenar la agresión iraní” en la región. Arabia Saudita afirmó en un comunicado: “Irán explotó los beneficios económicos (...) y los usó para continuar sus actividades de desestabilización”.

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