Gaza.— Los movimientos islamistas Hamas y Yihad Islámica anunciaron ayer un acuerdo, mediado por Egipto, para detener la escalada de tensión que dejó dos muertos palestinos en los bombardeos de represalia israelíes contra objetivos militares en Gaza, donde las milicias han disparado cerca de 200 cohetes.
El portavoz de Hamas, Fawzi Barhoum, alabó en su página de Facebook “el éxito de los esfuerzos egipcios para volver a la calma y detener esta escalada”, como secundó Dawood Shihab, vocero de la Yihad islámica.
Los medios locales señalaron que Egipto y el enviado especial para el proceso de paz de la ONU, Nicolai Mladinov, trabajaron para poner fin a las hostilidades, las más graves desde la operación militar Margen protector de 2014.
Israel afirmó haber realizado los bombardeos aéreos más importantes contra Gaza desde la guerra de 2014 en el enclave palestino.
Estos bombardeos se realizaron tras unas violentas manifestaciones el viernes, en las que murió otro joven palestino y cientos de personas resultaron heridas.
Tres civiles israelíes fueron heridos ayer luego que un cohete cayó en su casa, en el sur del país.
Del otro lado, dos adolescentes palestinos murieron en un bombardeo aéreo del ejército israelí en la Franja de Gaza. Estos eventos marcan una escalada en el contexto de la tensión que se vive desde marzo en la zona fronteriza, donde se convocan protestas palestinas cada viernes, en las que han muerto 139 personas.
El Ejército anunció que iba a “tomar represalias” contra Hamas para frenar “los diferentes tipos de terrorismo que han causado daños a comunidades israelíes” en los últimos meses, en forma de ataques contra la valla de separación, el lanzamiento de artefactos incendiarios y explosivos, de los que responsabilizó a los islamistas.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, había anunciado que aumentaría “la intensidad de los ataques” si fuera necesario y el diario Times of Israel le citó diciendo que se mantendría la campaña de represalia hasta que Hamas entendiera “el mensaje”.