Los Ángeles.— Los contagios por coronavirus alcanzaron los 13 millones en el mundo, mientras la pandemia obligó a tres entidades en Estados Unidos a retroceder en su reapertura.

A nivel global, el Covid-19 ha causado 571 mil 817 muertes, de acuerdo con el conteo de la Universidad Johns Hopkins.

Estados Unidos sigue siendo el país más afectado, con 135 mil 524 fallecidos y 3.35 millones de infectados. La cifra es de 55 mil 847 contagios más que el domingo y 369 nuevas muertes.

El avance imparable de la pandemia condujo al cierre de salones de restaurantes, bares y cines en California, además de iglesias, gimnasios, centros comerciales y salones de belleza en 30 condados golpeados del estado, incluido Los Ángeles. El gobernador de esa ciudad, Gavin Newsom, fue quien decretó la medida.

California fue uno de los primeros estados en imponer un confinamiento general en marzo, pero desde hace varias semanas el número de casos va en aumento hasta llegar a cerca de 330 mil, entre ellos más de 7 mil fallecidos. En Los Ángeles, 600 mil estudiantes se enteraron de que no volverán a las aulas a mitad de agosto como estaba previsto y que comenzarán el año con un modelo educativo a distancia.

En Nuevo México se volvió a ordenar el cierre de interiores en bares y restaurantes, y sólo queda permitido al aire libre, mientras que en Oregon se ordenó el uso de cubrebocas en espacios públicos y se limitó a 10 la cantidad de personas permitidas en reuniones.

El retroceso se da en medio de un intenso debate sobre las medidas de restricción, incluida la reapertura de escuelas, entre autoridades políticas de distintas jurisdicciones. Las discusiones y la presión de la administración del presidente Donald Trump por reanudar las actividades han impedido una respuesta coherente ante el avance del virus, que batió récords de contagios diarios en varios estados en los últimos días.

Autoridades de Houston, la mayor ciudad de Texas, pidieron por ejemplo un nuevo confinamiento después de que se detectaran mil 600 nuevos casos en 24 horas, pero el gobernador republicano Greg Abbott no cedió en un principio, aunque sí impuso el uso obligatorio de cubrebocas en los espacios públicos y advirtió sobre la posibilidad de un reconfinamiento, si la situación empeora.

El coronavirus avanzó sin freno por uno de los focos principales de la pandemia en Estados Unidos, Florida, que experimentó 12 mil 624 nuevos contagios por Covid-19, luego de registrar el domingo un récord nacional con 15 mil 300, mientras continúa la polémica sobre los intentos desde la Casa Blanca de desprestigiar a su principal epidemiólogo, Anthony Fauci.

Desde el 1 de marzo hasta ayer hay 282 mil 435 casos y mil 277 muertes en Florida, según los datos de su Departamento de Salud.

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