“Estamos en el hallazgo 540 y ya estamos contabilizando más de 600 individuos de mamut y junto con otras especies que son caballos, camellos, tigres dientes de sable, tenemos restos de más de mil individuos y hacen un total de más de 50 mil huesos que se han recuperado y 80% se encuentran en el centro de investigación, y están ahorita siendo registrados para la base de datos que va a permitir saber dónde está cada uno de ellos”, dio a conocer Rubén Manzanilla López, el arqueólogo que encabeza el grupo de especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) que participan en el proyecto de salvamento.
En el polígono donde se realiza la obra insignia del presidente Andrés Manuel López Obrador han sido hallados, aproximadamente, 100 entierros que están adscritos a una cultura arqueológica conocida como coyotlatelco, el resto son del posclásico tardío y pertenecen a la población otomí Xaltocan.
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“En cuanto a paleontología ya tenemos claro que es el sitio más importante de América Latina, porque hay otros sitios grandes en Norteamérica, en Estados Unidos, quizás el más famoso es el de Los Ángeles, el del Rancho La Brea, que tiene más de 100 años que está brindando fósiles de muchas especies que se quedaron atrapadas en fosas de chapopote, pero de la frontera con Estados Unidos para Sudamérica este es el más grande que hay hasta ahorita”, explicó.
Los más de 600 mamuts de la especie columbi no están completos por el proceso de deterioro natural, así como por las condiciones del suelo y a la presencia de depredadores o carroñeros, lo que ha ocurrido en toda la cuenca del Valle de México.
Lo encontrado en Santa Lucía es parte de unos asentamientos periféricos de la ciudad de Teotihuacán y de un sitio desaparecido que estaba en Tuxtepec.
“Son asentamientos de gente que se dedicaba a la agricultura, pero también al aprovechamiento de los recursos del Lago de Xaltocan, es muy interesante porque se han encontrado huesos de patos, de garzas, tortugas, mazorcas de maíz quemada”, reveló Manzanilla López.
También han hallado municiones de piedra y barro, cerbatanas de carrizo que eran utilizadas para cazar a las aves acuáticas del Lago de Xaltocan.
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Las excavaciones se encuentran en su etapa final, a partir del 1 de enero se contempla que no se realicen más porque concluirán parte de las obras que tienen que ver con el aeropuerto.
Los trabajos siempre han estado supervisados por arqueólogos del INAH. Cuando se detectaba la presencia de vestigios prehispánicos se acordonaba el área para que fuera intervenida por especialistas y las obras de la terminal aérea continuaban en las partes aledañas.
Al darse a conocer los hallazgos, grupos opositores al gobierno del Presidente exigieron que se suspendiera la construcción del AIFA, debido a la importancia de los vestigios prehispánicos; sin embargo, el Mandatario lo descartó.
