A bordo de una motocicleta Harley Davidson, portando uniforme de motociclista en color negro y detalles fluorescentes, Ezequiel Camacho González, coordinador General de Apoyo Vial Radar, recorre las ciclovías emergentes de la Ciudad de México, con la finalidad de retirar a cualquier vehículo que obstruya el libre tránsito de los ciclistas.

“Lo invitamos a despejar la ciclovía para que los usuarios no corran ningún tipo de accidente y puedan circular libres y seguros. Ésta es una advertencia, la próxima vez, será acreedor a una multa por parte de los agentes de tránsito”, comenta Ezequiel al conductor de una camioneta que “nomás tantito” se estacionó sobre la ciclovía en el eje 4 Sur frente a una tlapalería “en lo que compraba unas cositas”.

Las actividades que desempeñan los llamados jefes radar, dependendientes de la Secretaría de Movilidad (Semovi) capitalina, están diseñadas con la finalidad de mantener el orden y la seguridad vial.

Abarcan desde ayudar a cruzar avenidas a los peatones, brindar apoyo técnico a las personas que lo soliciten, supervisar las ciclovías emergentes y permanentes, realizar un conteo diario para determinar el aforo ciclista; hasta llevar a cabo operativos en conjunto con la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) en los cuales los jefes radar hacen los apercibimientos y los agentes de tránsito establecen las multas económicas correspondientes para los automovilistas.

“Normalmente, los jefes radar siempre están invitando a la ciudadanía a cumplir con el reglamento de tránsito, cuidan puntos donde hemos identificado altos índices de accidentes. Las actividades que llevan a cabo son muy diversas, pero las enfocamos en cuestiones de seguridad vial con el objetivo de ir mejorando, en general, todo el sistema de movilidad en la Ciudad”, dice en entrevista con EL UNIVERSAL, la directora de Seguridad Vial de la Secretaría de Movilidad de la Ciudad, Valentina Delgado.

Los jefes radar pertenecen al programa Apoyo Radar Vial de la Secretaría de Movilidad creado desde 1997.

Actualmente 110 personas integran este programa y se dividen en tres brigadas: motorizada (los que recorren las calles), educadores viales (dotan de información vial a la ciudadanía) y una más que se establece en los puntos más peligrosos para los transeúntes, basándose en datos del Reporte Trimestral de Hechos de Tránsito de la Semovi.

“Somos personajes ya conocidos a lo largo de las ciclovías, nuestro trabajo es salvaguardar la integridad física de los usuarios. Queremos que ellos sepan que el hecho de que estemos nosotros, es una garantía para que puedan gozar seguros de sus viajes en bicicleta por la Ciudad de México”, asegura Ezequiel Camacho.

De este modo, se busca mejorar la transitabilidad en la Ciudad de México, la cultura de la movilidad en los ciudadanos y disminuir los accidentes viales. Es por ello que también invitan a los ciclistas a conocer y respetar sus derechos y obligaciones como usuarios de las vialidades.

“Aunque no tenemos todavía esta cultura vial de respetar estos espacios, hemos visto que a lo largo de este año han ido disminuyendo el número de apercibimientos e infracciones. También les pedimos a los ciclistas que sean responsables y respeten el sentido de la ciclovía. Además de portar el equipo de seguridad necesario: casco, rodilleras, coderas y luces para evitar accidentes”, añade Delgado.

A través de la cuenta de Twitter @jeferadar los ciudadanos pueden comunicarse con estas figuras y solicitarles cualquier tipo de ayuda vial. Ellos llegarán lo más rápido posible al lugar donde se solicite el apoyo.

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