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Huixquilucan, Edomex.— Autoridades estatales obligaron a constructores a destapar sellos de clausura que colocó la Procuraduría de Protección al Medio Ambiente del Estado de México (Propaem) en Circuito Empresarial, en Interlomas y en Economía 33 en Lomas Anáhuac.

La Propaem realizó una serie de clausuras en accesos a obras de construcción de nuevos desarrollos, que afectan Área Natural Protegida (ANP), zonas ecológicas y donde los constructores han derribado árboles y ocupado barrancas.

Vecinos de Lomas Anáhuac, Bosques de La Herradura, Lomas de Las Palmas, Lomas del Sol, Hacienda de Las Palmas, Paseo de Las Palmas, Parques y Jardines de La Herradura, así como de Lomas Country Club, agradecieron la intervención del procurador ambiental Luis Eduardo Gómez García, por suspender con sellos de clausura obras que afectan Áreas Naturales, ocupan cauces y derriban árboles.

El 12 de abril la Procuraduría Ambiental mexiquense informó que “una inspección realizada a Banca Mifel, responsable del proyecto habitacional de tipo residencial llamado Iqono, en avenida Circuito Empresarial 83, en la colonia Centro Urbano San Fernando La Herradura”, en el corazón de Interlomas, para verificar documentación , los constructores no mostraron licencia de impacto ambiental a los inspectores de la Propaem, quienes documentaron derribo de árboles y un socavón de cerca de 25 metros de profundidad, así como excavadoras y una retroexcavadoras.

Dichos sellos fueron cubiertos con lonas negras por los constructores, además de los colocados en otro acceso ubicado en Boulevard Interlomas, tal como lo documento EL UNIVERSAL en recorrido por la zona.

Días antes la Propaem también clausuró la construcción de un desarrollo en un edificio de más de 20 pisos que construyen en un lote habitacional en la calle de Economía 33, donde los constructores colocaron grandes lonas negras para tapar los sellos de la Procuraduría Ambiental, expuso Alfonso Treviño de la Herradura, quien junto con vecinos de Lomas Anáhuac y de otros fraccionamientos se oponen a la afectación de áreas naturales y a las violaciones de uso de suelo.

En estas clausuras que fueron tapadas con plásticos negros, autoridades de Propaem, apoyadas por policías estatales obligaron a los desarrolladores a descubrir los sellos que pretendían ocultar.

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