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Luego de tres años, la iniciativa privada en conjunto con el Gobierno de la Ciudad de México lograron concretar la construcción de un edificio inmobiliario a un costado del Polyforum Siqueiros.

Desde 2014 que se dio a conocer el proyecto de la torre de 48 pisos que albergaría vivienda y comercios, vecinos de la delegación Benito Juárez e intelectuales manifestaron su rechazo a la obra.

Para detener su construcción los colonos recabaron en mayo del mismo año más de 35 mil firmas a fin de que el Polyforum fuera declarado Patrimonio del Mundo ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).

Ante la inconformidad de los vecinos, que derivó en manifestaciones y una cadena humana alrededor del recinto, el Polyforum aseguró que el proyecto no buscaba destruir ni mover el edificio que alberga el mural La Marcha de la Humanidad, de David Alfaro Siqueiros.

Precisó que el fin era crear un fideicomiso “para restaurar y revitalizar de manera sostenible la principal obra del maestro Siqueiros”.

Para blindar al inmueble, el 28 de octubre de 2014 a través de la Gaceta Oficial, el Gobierno capitalino declaró al Polyforum Cultural Siqueiros como Patrimonio Cultural Urbano de la Ciudad de México. Con ello, se prohíbe cualquier intervención en la obra plástica y escultórica, así como en las construcciones situadas en el predio ubicado en avenida de los Insurgentes Sur 701, en la colonia Nápoles.

Este decreto se suma al publicado en julio de 1980 en el Diario Oficial de la Federación por el que el Gobierno Federal declaró Monumento Artístico a la obra de David Alfaro Siqueiros.

Con ello se establece que cualquier acción en el inmueble requiere de autorización del Instituto Nacional de Bellas Artes, de las secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi) y de Cultura, ambas de la Ciudad de México.

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