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El Premio Nobel de Química Mario Molina aseguró que la reducción de emisiones contaminantes del transporte de carga tiene un enorme potencial para mejorar la calidad del aire en el Valle de México, ante lo cual propuso establecer un cobro a este tipo de vehículos si quieren entrar a la Ciudad de México.

“Hay transporte de carga que nada más cruza la Ciudad, que lo podría hacer por afuera, pero les cuesta y no lo hacen, entonces debe ser al revés; habría que cobrar más si se meten a la capital y darles incentivos para que eviten pasar por el Centro”, propuso Molina Pasquel.

En conferencia magistral ante la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, añadió que se requiere importar o producir diesel de muy bajo azufre para estos vehículos.

Planteó más alternativas para mejorar la calidad del aire, como generar un uso racional del auto al establecer algún cobro si se desea utilizar diario, porque esa actividad implica un costo a la Ciudad en el ambiente.

En su ponencia mencionó que si bien los días con contingencia por ozono bajaron de 220 en 1991 a tres el año pasado, también “hay una preocupación en años recientes porque esto está subiendo otra vez. Claro, nuestra Ciudad está cambiando, tenemos muchos más automóviles, el tamaño de la flota vehicular ha aumentado espectacularmente”.

Mostró que la flota vehicular en la capital subió de 3.2 millones en 1996 a 5.7 millones en 2016; además, la velocidad promedio bajó de 38 kilómetros por hora en 1990 a 13 kilómetros durante el año pasado.

En contraste, mencionó que la Ciudad de México debe impulsar un transporte público masivo de primera y tener mejor coordinación con el de la entidad mexiquense.

Al participar en el primer Taller para la Elaboración del Programa de Gestión Ambiental de la Calidad del Aire (ProAire) de la Zona Metropolitana del Valle de México 2021-2030, Molina expuso que se debe poner más atención en la reducción de las llamadas partículas finas, como las PM 2.5, porque son más dañinas a la capacidad pulmonar.

Llamó a retomar modelos para predecir las contingencias con un día de anticipación, pues ahora esta medida se decreta un día después de que se hay muy mala calidad del aire, por lo que la gente se expone a la contaminación durante el día crítico.

Nuevas medidas. Al inaugurar el taller, Sheinbaum Pardo dijo que este es el inicio de la discusión con expertos para hacer un nuevo Proaire, el cual liderará Mario Molina.

Calculó que en el segundo semestre del año se pondrán en marcha las primeras medidas a corto plazo de su gestión para mejorar la calidad del aire y que cada año se buscará reducir más las emisiones.

En ese contexto, la mandataria capitalina comentó que no se tratará de medidas improvisadas, calificativo que puso a los ajustes del programa Hoy No Circula que realizó la pasada administración para evitar los altos niveles de contaminación.

La secretaria de Medio Ambiente, Marina Robles, mencionó que a mediados de 2020 se espera tener el documento final del nuevo Proaire.

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