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La directora General del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) de la Ciudad de México, Esthela Damián Peralta, informó que a partir de septiembre estudiantes de preescolar, primaria y Centros de Atención Múltiple tendrán desayunos calientes, como omelette con espinaca, para aportarles mayores nutrientes.

Las modificaciones al Programa de Alimentos Escolares se debe al cumplimiento de los lineamientos de la Estrategia Integral de Asistencia Social Alimentaria (EIASA) del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de l a Familia (SNDIF), que se publicaron hace siete años, en los que se estipula el cambio de los alimentos fríos a calientes en escuelas públicas, y su costo pasará de 0.50 centavos a 13 pesos.

“Se ha comprobado que el alimento caliente aporta mayores valores nutricionales; entonces, migrar del alimento frío, que es una barra de cereal, fruta y una leche, a un alimento sólido es lo mejor, Tenemos el propósito de hacerlo paulatinamente este año, para tener una cobertura completa en 2020”, dijo a EL UNIVERSAL.

Entrevistada en su oficina, que está ubicada en colonia Tlacoquemecatl del Valle, Damián Peralta explicó que el programa está próximo a darse a conocer, por lo que adelantó que ya tienen 20 menús aprobados por el SNDIF; sin embargo, aún se encuentran delineando cómo serán distribuidos y en qué escuelas comenzarán.

De acuerdo con información obtenida por este diario, el DIF está valorando el costo de 13 pesos y se realizará un subsidio a ciertas zonas de la capital que no puedan cubrir la cuota por completo.

El desayuno frío tiene una barra de cereal, fruta y leche, esta última tiene vitamina A y D, y disminuye el riesgo de desnutrición, de acuerdo con la certificación que tiene.

En ese sentido, explicó que la leche no se quitará cuando se cambié a desayunos calientes, sino que tendrá únicamente una modificación en su fórmula, la cual será fortificada (con hierro y zinc).

Aseguró que los alimentos escolares no competirán con las cooperativas, ya que son productos diferentes y lo que buscan es un bien común para los pequeños. Añadió que la Secretaría de Educación Pública (SEP) no riñe sobre esta propuesta con el Gobierno local, sino que buscan colaboración.

Detalló que Nuevo León y Ciudad de México no cumplen estos lineamientos desde hace siete años, por lo que consideró que hay un rezago, pero justificó que este cambio no se pudo hacer desde el pasado 5 de diciembre, cuando llegó la actual administración, porque implicaba no dar desayunos.

Comentó que el programa de desayunos escolares es diferente al de SaludArte, ya que este último ofrece en un horario extendido de clases una ración de comida y participan de talleres de danza, música, canto o artes plásticas, así como de activación física y cuidados básicos de salud e higiene.

Actualmente, el Programa de Desayunos Escolares tiene una cobertura en preescolar, primaria y Centros de Atención Múltiple; es decir, 2 mil 682 planteles y se han entregado cerca de 56.2 millones de raciones de alimentos, desde el inicio de la administración hasta junio.

Al preguntarle por qué se mantuvo a la misma empresa de la administración anterior, Damián contestó que ampliaron el contrato con Segalmex debido a que la licitación que lanzaron quedó desierta.

Al Programa de Desayunos Escolares de la Ciudad de México se le asignó un presupuesto de 831 millones 298 mil 755 pesos, pero para cumplir los lineamientos nacionales necesitará una ampliación presupuestal para garantizar los alimentos calientes.

Adicionalmente, el DIF está buscando convenios con la SEP para la búsqueda de 100% del peso y talla de los niños que estudian en escuelas de la Ciudad, ya que no se tienen desde hace cinco años.

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