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Si te gusta el café e incursionar en los diferentes métodos de extracción, sigue el paso a paso de esta nota para lograr el mejor café hecho en prensa francesa. Es fácil de hacer y con resultados que te harán disfrutar mucho el perfil aromático de cada taza en tan solo 10 minutos.
Empecemos por el agua, la cual debe llegar a una temperatura entre los 90 y 96°C, si no tienes un termómetro lo podrás detectar al momento en que el agua comience a burbujear en el fondo de la jarra u olla.
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Mientras tanto, pesa el café. La proporción es 1 a 10. Por cada 100 gramos de café será un litro de agua. Muele el café a manera que el grano quede como si fueran migas de pan. Agrégalo a la prensa, después el agua y revuelve con una cuchara para asegurarse de que el grano quede perfectamente humedecido.
Tapa la prensa francesa y espera cuatro minutos. Es el tiempo suficiente para que el agua extraiga las propiedades del café. Baja el pistón con cuidado y sirve inmediatamente. Si queda café en la prensa francesa, guárdalo en un recipiente térmico para que no pierda temperatura, ya que si la dejas en ahí, comenzará a tomar notas amargas y eso no te gustará.
De acuerdo a Gaby Lemoniet de Café Ge si el grano está en las mejores condiciones de conservación puede durar hasta un año. “Lo ideal es tenerlo en presentaciones de 500 a 250 gramos para darle una salida rápida y solo moler la cantidad que se usará en ese momento para preparar café”, explica. “El contenedor debe estar bien cerrado ya sea en un espacio sin luz en la alacena o en el congelador, ya que la humedad y el calor son los peores enemigos”, finaliza.
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