Nadie se puede resistir a beber, al menos, una cerveza . Considerada unas de las bebidas alcohólicas más nobles y democráticas, todos tenemos nuestra preferida a la hora de consumirla. Hay quienes prefieres las rubias, otros las oscuras. Algunos beberla directa de la botella, sin importar si se trata de una ampolleta o una caguama . Al final, todos coincidimos que bien fría es como mejor sabe.

Sin embargo, no es en lo único en lo que estamos todos de acuerdo, hay otras coincidencias y la mayoría son errores que todos hemos cometido o que seguimos haciendo. Y sí, todos hemos fallado a la hora de echarnos una chela . ¿No nos crees? Celso Guzmán , director de , nos comparte un listado de cinco errores más comunes a la hora de beber cerveza.

1. Beber la cerveza directo de la botella

No es malo, sin embargo, al hacerlo se pierde en su plenitud la experiencia de sabor. Cuando se sirve en vaso los ingredientes y aromas que la conforman salen a la luz y se aprecian mejor en los sentidos.

2. Tomar todo tipo de cerveza a la misma temperatura

Aunque al final todo se resume a que es cerveza, la realidad es que cada una tiene un tratamiento diferente, por ello, debemos saber qué es lo que vamos a beber para tenerla en la temperatura adecuada. “Un tip es que las cervezas con poca graduación deben servirse un poco más frías que las que son más fuertes”, nos explica Celso.

3. Servirla con demasiada espuma

De entrada, es importante saber que la espuma permite que la bebida no se oxide. Y aunque se vea muy cool para las fotos de Instagram , la realidad es que no se debe abusar ni provocar que se genere demasiada espuma cuando se sirve. Por ellos, se recomienda “inclinar el vaso a un ángulo de 45º y poco a poco regresarlo a la posición vertical”, sugiere. Para saber que lo hiciste bien, procura que la espuma quede a 1 o 2 dedos. ¡Entendido!

4. Congelar en vaso

La idea de beber una cerveza , además de refrescarnos, es degustar todos los sabores y olores que la conformar, por ello, se recomienda que nunca se sirva la chela en un vaso congelado y la razón es muy sencilla, ya que al hacerlo se corre el riesgo de que se contamine con otros aromas . Es decir, que se impregne de algún otro olor que pueda tomar del congelador o refrigerador. “Lo mismo pasa si agregas hielo, por lo que esto ni se te ocurra”, revela Celso.


5. Guardarlas por demasiado tiempo

Aunque no lo creas, las cervezas también tienen fecha de caducidad, sin importar si todo el tiempo la tuviste dentro del refrigerador. Y es que con el paso del tiempo la bebida irá perdiendo paulatinamente sus propiedades y al destaparla no tendrá su sabor original. Lo mismo ocurre con el sitio donde se encuentre, por ello, evita que esté expuesta al sol o la luz.

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