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Torreón.— En los últimos dos meses han arribado alrededor de mil migrantes —la mayoría africanos— al municipio de Acuña, frontera con Del Río, Texas; sin embargo, Carlos Flores Diego, encargado de despacho de Protección Civil, descartó alguna emergencia por la cifra.
Precisó que de los mil migrantes, alrededor de 600 ya cruzaron el río Bravo o fueron atendidos por el gobierno estadounidense por medio de las citas y entrevistas migratorias para solicitar asilo.
“Otros permanecen aquí y esperan ser llamados. Se levantó una lista y es la autoridad de Estados Unidos quien los llama para atenderlos”, comentó Flores Diego.
La mayoría de los africanos provienen del Congo o Angola, aunque también hay haitianos y brasileños. El funcionario precisó que dos semanas atrás sí arribaron camiones turísticos que trasladaban hasta 55 migrantes, pero en los últimos días han llegado de a tres, cinco o hasta 12 extranjeros.
La mayor parte de los migrantes africanos vienen desde Chiapas, otros de Hidalgo o Veracruz. Dijo que la mayoría tienen permiso para permanecer en el país, ya sea por tres meses o de forma permanente, y que por lo general traen dinero, por lo que se quedan en casas de renta u hoteles.
Acuña tiene seis centros comunitarios y sólo uno se ha habilitado como albergue temporal. El centro da refugio actualmente a 45 migrantes, a muchos de ellos porque se les acabó el dinero para pagar renta, afirmó Carlos Flores.
“No hay ninguna emergencia, pues ya llegan con una categoría legal como cualquiera de nosotros y no están arribando a la intemperie, sino a un lugar seguro, con agua, drenaje, electricidad, traen dinero, traen celulares, compran en los negocios de aquí, andan bien vestidos.
“Al parecer es gente que no les iba mal en sus lugares de origen. A diferencia de los que llegaron en mayo, éstos han llegado a hotel o casa de renta. Tienen comunicación con alguien, ya saben buscar”, refirió el funcionario.
De hecho, recordó que recientemente se ofreció una brigada de salud que incluyó bolsa de trabajo para los migrantes africanos, pues algunos manifiestan su intención de quedarse.
El encargado de Protección Civil dijo que se logró colocar a 15 personas y que muchos otros se están autoempleando, andan en cruceros, haciendo trabajo de limpieza en lotes o patios de casa y otros más en la obra.
Dijo que en un principio había preocupación de la población por los temas de salud; sin embargo, explicó que se realizó la brigada para atenderlos y aplicar vacunas a quien lo necesitara.
Flores Diego aclaró que no pueden estar hostigando a los migrantes africanos, porque la mayoría llegó con permisos de estancia. Aunque refirió que se instaló un filtro para revisar sus papeles.
También añadió que muchos extranjeros así como llegan intentan cruzar el río Bravo. “Nos tocó que llegaron 20, 25 en la madrugada y quisieron cruzar. El Ejército tiene patrullada la parte del río Bravo donde más comúnmente cruzan. Vienen familias, pero también personas en lo individual”, agregó.
