Quien experimentó en carne propia aquel dicho que de “cuando te toca ni aunque te quites”, nos aseguran, fue el exedil de Santiago de Anaya, Hidalgo, Cliserio Ramírez (PRI), una vez que el actual alcalde, el también priista Jorge Aldana, decidiera embargarle y rematarle una de sus “casitas”, a fin de cobrar parte de la deuda que el exalcalde dejó en el municipio. Sin consideración, nos narran, el actual munícipe remató la finca de 840 metros cuadrados en 800 mil pesos, decisión que fue celebrada en Santiago de Anaya, ya que don Cliserio dejó huella… pero por tener una de las administraciones más opacas en esa entidad indígena, marcada por un desvío de varios miles de pesos. Nada como quitarle un pelo a un gato, se escuchó por ahí.

Lo bailado nadie se lo quita

En tremendo lío, nos comentan, se metió la diputada local de Puebla, Nora Merino Escamilla (PES), luego de que fuera evidenciada, con fotos y videos, en un reciente viaje a Acapulco junto con sus amigas, así como en una fiesta con mariachis, cigarros y canto. El tema, nos explican, es que acosada por las evidencias y críticas de quienes se le fueron encima porque ella misma propuso castigar hasta con 15 años de cárcel a quienes, sabiendo que tienen Covid-19 contagien a otros, doña Nora salió a disculparse y a asegurar que el video de la fiesta es de meses anteriores —no dijo cuál—, y en el caso del viaje, efectivamente, lo realizó, aunque con sus respectivas medidas de seguridad. ¡Cuéntenos más, diputada!

Y en el norte... la pachanga sonó al ritmo de norteño

En Hermosillo, Sonora, nos narran, los ánimos también se calentaron, pero contra Miguel Ángel Soria Zamora, un líder sindical de la CTM quien el pasado fin de semana hizo una megapachanga para celebrar su cumpleaños 31, a la que acudieron decenas de invitados y un grupo norteño en vivo, pero no Susana Distancia. Aunque se trató de un evento privado, nos dicen que la difusión de videos y fotografías sobre la fiesta caló hondo, sobre todo porque la entidad está en su punto máximo de contagios y aunque, tras ser reportado, don Miguel recibió una multa de 43 mil 440 pesos, para muchos este fue apenas un castigo mínimo, considerando todas las vidas que puso y está poniendo en peligro.

Toque de queda y jalón de orejas

Nos cuentan que en Jalisco nadie le avisó a la alcaldesa de Tapalpa, Luz Elvira Manzano, que no tiene facultades para decretar un “toque de queda” para evitar contagios de Covid-19 en su terruño, como lo hizo el martes pasado a través de un video en sus redes sociales, por lo que la Comisión Estatal de Derechos Humanos emitió una serie de medidas cautelares en las que le pide a doña Luz que se abstenga de violentar el derecho al libre tránsito, consagrado en la Constitución, y que mejor fomente el diálogo y la empatía con los ciudadanos para que respeten las medidas sanitarias. Al buen entendedor...

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