Cancún.— Ciudadanos de Puerto Morelos denunciaron que la construcción del hotel The Fives, en la zona costera, violenta las condicionantes que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) impuso para otorgar la autorización de impacto ambiental a dicho desarrollo que, de continuar, podría provocar “impactos irreparables” al acuífero y al Área Natural Protegida (ANP) denominada Parque Nacional Arrecife de Puerto Morelos.

La denuncia popular, que cuenta con firmas de más de 40 ciudadanos, fue presentada el 6 de mayo ante la delegación de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), ubicada en Cancún; sin embargo, no ha sido atendida.

El lunes, integrantes del colectivo Puerto Morelos Sustentable acudieron a las oficinas de la delegación para revisar el estatus de la denuncia, debido a que las obras avanzan rápidamente bajo irregularidades que podrían derivar de impactos irreversibles como el daño al Parque Nacional Arrecifes, que forma parte de la segunda cadena coralina más grande del mundo, denominada Sistema Arrecifal Mesoamericano (SAM).

La sorpresa del colectivo fue que les notificaron que el delegado de la Profepa, Javier Castro, renunció el 15 de mayo y que se trabaja apenas con cinco inspectores para todo el estado.

Sin embargo, el exfuncionario confirmó a EL UNIVERSAL que, a nivel central, se pidió la renuncia de los delegados de la Profepa, con fecha al 15 de mayo. Precisó que la dependencia en Quintana Roo cuenta con 18 inspectores y no con cinco.

The Fives Downtown Puerto Morelos se desarrolla en una de las principales calles del casco antiguo de ese municipio, al sur de Cancún.

Consiste en dos edificios con 72 departamentos en siete niveles y un sótano, que operarán como condohotel, en un predio de tres mil 82 metros cuadrados, colindante con la playa.

El proyecto es promovido por la empresa Sierra de Bernia, que obtuvo el cambio de uso de suelo de habitacional multifamiliar con densidad media —Clave H2-M— a Turístico Hotelero Medio, con clave THM, que permite la construcción de 410 cuartos por hectárea, con una altura máxima de siete niveles.

Otra irregularidad detectada es que no se ha especificado el manejo de las aguas residuales, siendo que el proyecto pretende operar 72 departamentos en una zona carente de drenaje y colindante a la playa.

Tampoco se consideró la zona de influencia del proyecto, correspondiente al ANP y también como sitio Ramsar, es decir, de protección especial para los humedales de la zona.

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