Espectáculos

A Ernesto le halaga que lo comparen con su mamá

D’Alessio, quien recuerda a una Lupita traviesa con sus hijos, se dice orgulloso del éxito de su madre

El cantante cerró temporada de Los Miserables en abril. Foto: IVÁN STEPHENS. EL UNIVERSAL El
09/05/2019 |23:07
Elizabeth Escobar
reportera de la sección EspectáculosVer perfil

elizabeth.escobar@eluniversalclabsa.mx

Ernesto D’Alessio está muy orgulloso de tener una madre que a sus 65 años de edad conserva una extraordinaria voz y llena recintos como el Auditorio Nacional, por lo que asegura sentirse halagado que lo comparen con ella.

“Está llenando un Auditorio en tiempos en donde se tienen que presentar dos o seis cantantes juntos para hacerlo, claro ha hecho presentaciones con Yuri, con Paquita, pero ella siempre vuelve sola”, dijo el actor y cantante en entrevista.

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El hijo de la Leona Dormida la acompañó el mes pasado en su presentación en el Auditorio Nacional con los temas “Amor contigo me da igual” y “Ni guerra, ni paz”, con una voz, que en ocasiones han criticado por parecerse a la de ella. Pero a Ernesto le halaga la comparación.

“Con todo respeto, no sólo es la mejor cantante, sino la mejor intérprete que ha dado México, toda Latinoamérica”.

El cantante nunca ha sentido que la fama de su madre lo haya eclipsado, pues indicó que ha logrado cosas en donde su progenitora no.

“El trayecto que tengo en el teatro musical ella no lo tiene y mira que hizo teatro musical con La novicia rebelde, pero no le gustó. Ahí puedo decir que he podido hacer mi propio camino”, señaló Ernesto, quien cerró temporada de la puesta en escena de Los Miserables en el papel de Jean Valjean.

En el marco del Día de las Madres, el actor recordó una anécdota que vivió de niño.

“Mi mamá tenía una casa en Cuernavaca, un día llegamos, nos llevó al jardín y estaba arreglado como una fiesta sólo para mi hermano, ella y yo y había dos piñatas, una estaba llena de harina, nos bañó y mi mamá no podía parar de reírse. Es una anécdota que recuerdo mucho de mi mamá traviesa”.

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