Ya inmersa en una economía en caída libre que ha alarmado a sus vecinos, Venezuela se encuentra bajo renovada presión internacional tras la cuestionada reelección del presidente Nicolás Maduro el domingo, lo que abre un capítulo de profunda incertidumbre en torno al futuro del país sudamericano.

Frente a una hiperinflación de cinco dígitos que alcanzaría 16,000% a fin de año—el Fondo Monetario Internacional ( FMI ) espera que la economía se reduzca en 15% y que el desempleo aumente a 36% para 2022 —, cortes de energía y de agua , así como e scasez de alimentos y medicinas , cerca de tres millones de personas han salido de Venezuela desde 2014 a Colombia (casi 550,000 al concluir 2017), Brasil , Perú y Chile .

Como ha informado, México también es un destino creciente para los refugiados económicos, muchos de ellos mujeres jóvenes que terminan trabajando ilegalmente en la industria sexual.

Maduro prometió comenzar una “ revolución económica ” para restaurar la prosperidad y desafiante, afirmó que está listo “para hacer historia” ante las sanciones de Estados Unidos .

Sin embargo, la hiperinflación, junto a la moratoria en el pago de USD$70,000 millones en bonos, implica que no pueden importarse alimentos y medicinas.

El régimen lucha para evitar una moratoria en el servicio de su deuda externa, un escenario de “fin del juego” que analistas financieros en Caracas y Nueva York han pronosticado desde 2016 .

Los militares han sido puestos a cargo de la distribución de comida y al gobierno se le está agotando el efectivo, pese a la nueva criptomoneda petro y la revaluación del bólivar , la divisa tradicional, lanzadas por Maduro en marzo.

El innovador petro está garantizado por los recursos minerales de Venezuela: la mayor reserva petrolera del mundo y enormes reservas de oro y de otros metales preciosos , pero el sector energético está dejando de cubrir la demanda local.

La Organización de Países Productores de Petróleo ( OPEP ) indica que la producción se redujo a un mínimo de 30 años, con cerca de 1.4 millones de barriles diarios ; inversión insuficiente, las sanciones de Estados Unidos y la caída de los precios globales—los ingresos dependientes del crudo disminuyeron de USD$121,000 millones a USD$48,000 millones entre 2014 y 2016 —han golpeado a la industria energética.

A su vez, la firma estadounidense ConocoPhillips incautó activos de la estatal Petróleos de Venezuela, S.A . ( PDVSA ) por un litigio que asciende a USD$2,000 millones .

Sanciones paralizantes

El lunes, las 14 naciones del Grupo de Lima , que incluye a México , señalaron en una declaración conjunta que limitarán las relaciones diplomáticas con Caracas y estudiarán bloquear todos los créditos y transacciones comerciales con el país que no tengan aprobación de la Asamblea Nacional bajo control opositor, elegida en 2015 pero reemplazada por el gobierno mediante la Asamblea Nacional Constituyente.

El Grupo de Lima subrayó que no reconoce la legitimidad de la elección y el próximo mes Perú será anfitrión de un encuentro de alto nivel entre autoridades migratorias de los 14 países, para evaluar una respuesta integral ante la cantidad masiva de venezolanos que están dejando su territorio.

La declaración conjunta añadió que se respaldará el abasto de medicamentos a través de instituciones independientes, al igual que la vigilancia epidemiológica en Venezuela y las naciones limítrofes, dada la reaparición de enfermedades como sarampión , paludismo y difteria .

Por su lado, el presidente de los Estados Unidos , Donald Trump , expidió una orden que prohíbe a sus ciudadanos y personas que se encuentren en ese país adquirir deuda venezolana o aceptar cualquier participación en activos que sean propiedad en su mayor parte de Caracas.

La última medida parece estar encaminada contra CITGO , la empresa petrolera en Estados Unidos controlada por PDVSA . Washington ya sancionó a más de 60 funcionarios en activo y retirados.

La semana pasada, por primera vez vinculó públicamente a Maduro con el narcotráfico , al acusarlo de lucrar con embarques ilícitos e imponer sanciones al “número dos” del oficial Partido Socialista Unificado de Venezuela ( PSUV ), Diosdado Cabello , su esposa Marleny Contreras , que dirige al organismo nacional de turismo, y su hermano José David .

El secretario de Estado , Mike Pompeo , aseguró que Estados Unidos aplicará “rápidas acciones económicas y diplomáticas” para respaldar a la democracia en Venezuela, como parte de una escalada verbal que confirma la postura belicosa de Washington asumida desde Corea del Norte e Irán hasta la relación con Caracas, que impulsan el mismo Pompeo y John Bolton , asesor de Seguridad Nacional .

Juan Cruz

, asistente especial de la Casa Blanca y director para Asuntos del Hemisferio Occidental , declaró que en la historia de Venezuela “nunca ha habido un momento seminal que no involucre a los militares”.

Al menos en dos ocasiones, el propio Trump se ha referido a la “ opción militar ” para Venezuela , sorprendiendo a los diplomáticos latinoamericanos moderados que consideran que aún hay espacio para una solución pacífica, ante el apoyo que Maduro mantiene entre los venezolanos más pobres.

El breve y fallido golpe de 2002 contra el presidente Hugo Chávez recibió ayuda de inteligencia de la Marina estadounidense. Ésta vez, según informes filtrados al sitio , el Comando Sur del Pentágono tiene un plan que pide “acrecentar la inestabilidad interna” que justificaría una intervención militar.

El conflicto venezolano representa una oportunidad única para la diplomacia multilateral que América Latina no puede desperdiciar; para México , también es el momento de recuperar el liderazgo en la región, al colaborar para detener la exacerbación de la crisis humanitaria en curso.

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