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Ticul, Yuc.— A pesar de que criticó al presidente Enrique Peña Nieto por tener supuestos contratistas favoritos, Andrés Manuel López Obrador aceptó que dio contratos sin licitación al ingeniero José María Riobóo para la construcción de los segundos pisos de la Ciudad de México cuando fue jefe de Gobierno.

Durante un mitin en esta localidad maya, el candidato presidencial de la coalición Juntos Haremos Historia aseguró que el presidente Peña Nieto dio el contrato sin licitación para ampliar el hangar de resguardo del avión presidencial.

Minutos después, aceptó que él también dio contratos directos a la Compañía Riobóo S.A. de C.V., para la construcción de cimientos de los segundos pisos, pero aclaró que esa obra fue auditada varias veces y no registró irregularidades, incluso el fideicomiso de ese proyecto estaba en Banobras, dirigido en ese entonces por Felipe Calderón Hinojosa, ahora ex presidente de México.

“¿No fue su contratista preferido?”, se le cuestionó.

“No es cierto, no es cierto. Eso se hizo de conformidad con la ley, en su momento. [El proyecto] se entregó a esta empresa después de que se hizo un análisis de que era el mejor estructurista que se tenía para construir los segundos pisos.

“Fue auditado muchas veces por el fideicomiso que manejó el dinero de los segundos pisos que yo construí, estaba en Banobras y saben quién estaba de director de Banobras, Felipe Calderón. O sea, yo no tengo nada de qué avergonzarme, me pueden llamar peje pero no soy lagarto”, aseveró.

La acusación comenzó en el debate, cuando su rival Ricardo Anaya afirmó que la compañía de Riobóorecibió contratos directos por 170 millones de pesos.

El tabasqueño respondió a medios que el panista es “muy cínico, muy hipócrita, es una risa postiza, entonces es muy corrupto y miente como respira.

“Anaya quiso con eso sorprender, no hay nada chueco, oculto, como se lo dije ayer, yo no soy corrupto”, expresó.

López Obrador aclaró que no habrá cacería de brujas de llegar a la Presidencia.

“Nosotros no vamos a hacer cacería de brujas, no vamos a perseguir a nadie, no se van a tener que ir al exilio ni ir a la cárcel. Queremos justicia, no venganza, ni Anaya va a ir a la cárcel”, afirmó.

A pesar de los ataques, López Obrador afirmó que le fue bien en el tercer debate presidencial que se realizó en Mérida, pero que no se echará a la hamaca y cerrará con intensidad la campaña presidencial.

“Nos fue muy bien, la verdad, no pudieron, se dedicaron a atacarme, pero salí de la calumnia ileso. Ya estamos a muy pocos días y creo que este arroz ya se coció, de todas maneras tenemos que seguir haciendo la campaña y no me voy a echar a la hamaca, vamos a seguir recorriendo el país con más intensidad en los cierres”, indicó.

El tabasqueño confió en ganar la Presidencia y al final le agradecerá a Ricardo Anaya por no haber pactado con el gobierno federal para realizar un fraude electoral.

“Va a significar un componente fundamental en la elección, es que no se pusieron de acuerdo los de la mafia del poder, al final voy a terminar agradeciéndole a Anaya, porque por su actitud y la desconfianza que genera no permitió que se diera un acuerdo del PRIAN, como siempre había sucedido, en 2006 hubo ese acuerdo, en 2012, ahora no”, indicó

“No, a partir de que no se pusieron de acuerdo, si lo hubieran hecho hubiera estado reñida la competencia, porque era el uso del aparato, más los partidos, entonces no iba a ser fácil. Pero no, ya se resolvió este asunto favorablemente y voy a llamar a todos a la unidad y a la reconciliación”, dijo.

El tabasqueño celebró que algunos juegos del Mundial sean en México y adelantó que creará las condiciones para que se haga bien esa competencia mundial.

“Vamos a ir de triunfo en triunfo, vamos a ir de festejo en festejo, va a volver la alegría y felicidad al país”, expuso.

Al cerrar el día con un evento en Chetumal, Quintana Roo, aseveró que le va a ganar la divinidad del pueblo al “cochino dinero”.

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