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En el ánimo de Cuauhtémoc Blanco existe la confianza de ganar la contienda electoral, aunque también cruza por su mente el temor del fraude:

“No hay otra forma de que nos ganen; ni aunque se unan todos los candidatos me alcanzan”, dice el abanderado de la coalición Juntos Haremos Historia con la seguridad que le conceden las encuestas, cuya intención del voto lo coloca en primer lugar.


¿No temes que las circunstancias sean adversas el 1 de julio?

—No, no creo. Yo tengo mucha fe en que vamos a ganar. Lo único que te digo es que mi temor es el fraude electoral del hijastro del gobernador Graco Ramírez [Rodrigo Gayosso, candidato de la alianza PRD-PSD], porque están desesperados.

Tú lo estás viendo con Jorge Meade Ocaranza [abanderado del PRI], que a lo mejor va a querer declinar a favor de Rodrigo Gayosso porque quieren seguir teniendo hueso ahí en el gobierno del estado.

Así se manejan estos políticos que han maltratado a toda la gente y a todos todos los ciudadanos, por eso el estado está como está. No hay trabajo, no hay empleo; hay inseguridad, corrupción, y en todos los estados creo que estamos igual, pero aquí es uno de los peores.


¿Te va alcanzar el tiempo para hacer algo en el gobierno?

—Claro que sí. Ahora sí voy a tener una gran oportunidad de bajar muchos recursos para ayudar a todos los municipios, no como con este gobierno que ayudó a casi todos porque estaban vendidos. Hubo unos seis o siete que jalaron conmigo.

De sus propuestas de campaña y planes de gobierno, el aspirante de Morena-PT-PES habla poco y lo que siempre surge en su discurso es el combate a la corrupción y la garantía del cambio mediante la aplicación honesta de los recursos y de los programas de beneficio social.

El Cuauh afirma que su relación con Andrés Manuel López Obrador es excelente, y de paso desestima el hecho de que de recientemente el aspirante presidencial olvidó mencionar a Morelos como uno de los estados donde su coalición tiene amarrado el triunfo electoral.

“Él sabe que aquí en Morelos estamos con muchísima fe y confianza. Vamos arriba en las encuestas, vamos a ganar por goliza o, como dice él, por paliza”, comenta.

En su casa de campaña, Blanco Bravo está acompañado de sus principales colaboradores sentados en una larga mesa, mientras el ex jugador de futbol ocupa un sillón frente a una pantalla de televisión para seguir los detalles del Mundial de Rusia.

Mientras su oponente tricolor, Jorge Meade, llama al resto de los contendientes para hacer una alianza en contra del Cuauh, puntero en las encuestas. Del otro lado, su más cercano rival, el abanderado del PRD-PSD, Rodrigo Gayosso, muestra músculo con una estructura que abarrota el zócalo capitalino. Sin embargo, Cuauhtémoc Blanco se da tiempo para acudir a los últimos recorridos de proselitismo político, y entre sus pausas sigue el curso de la Selección Mexicana.

Al cierre de la campaña, hasta la candidata del PVEM, Nadia Luz Lara Chávez, convocó a los candidatos del PRD-PSD, PH, PRI, PAN y el independiente a unirse; pidió a la ciudadanía razonar su voto para evitar que el 2 de julio se arrepientan de contar con un gobierno donde la ocurrencia, la improvisación y la revancha se instalen por seis años, en una clara alusión a Cuauhtémoc Blanco.

“Ahora sí que todos están contra mí, pero aquí estamos y la decisión la tiene la gente, y ellos están enojados con este gobierno que siempre les ha mentido”, asegura.

¿Cómo te gustaría que te evaluara la gente?

—Me encantaría que cuando terminara la gente se vaya feliz, la gente me diga que hice muy bien las cosas; como dicen estos políticos, este futbolista les va a enseñar a trabajar, no a robarse el dinero.

Una y otra vez Blanco se muestra confiado del triunfo y asegura que meterá goliza a sus adversarios. Y aunque se le insiste en que todos están cerrando filas para verlo perder, el ex jugador remata: “Ni todos juntos me ganan”.

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