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A casi dos años de haber asumido la dirección de la Revista de la Universidad de México, en cuyo tiempo ha publicado 22 números de la Nueva época de esta publicación que inició en noviembre de 1930, Guadalupe Nettel asegura que esta es la revista que quería hacer. “Estoy súper satisfecha con el resultado, me parece que es una revista muy útil en este momento en México, ha sido como recuperar el espacio de diálogo y de debate cultural a partir de temas muy interesantes”.

La escritora, que asumió el cargo en junio de 2017, reconoce que le gustan mucho las revistas plurales e interdisciplinarias porque son más útiles, “pueden ser como pequeñas reuniones en un departamento, con la misma gente siempre, o grandes festivales en los que invitas a colaborar a desconocidos que están haciendo cosas interesantes y que pueden aportar puntos de vista distintos. Eso es lo que estamos tratando de hacer, abrirnos lo máximo posible a muchas voces pero respetando la calidad literaria y la seriedad de los textos”.

En la revista que cada mes tiene un tiraje de 4 mil ejemplares impresos y en su plataforma digital registra 600 mil visitas, apuestan por temas y abordajes que provoquen la reflexión y al diálogo. “Lo que nos gustaría es que la gente tomara conciencia de cuál es su responsabilidad; nosotros no se las vamos a decir, queremos que ellos se cuestionen, que se planteen ‘qué podemos hacer’, ‘cuál es nuestro papel’, cómo podemos contribuir; esa es la idea, que tomemos todos responsabilidades y que todos al tomar conciencia empecemos a cambiar nuestras acciones”, señala.

Con esa convicción han editado la nueva época de la revista y es la mirada que priva en su número de abril, titulado “Abya Yala”, en que abre preguntas sobre cuáles son las formas actuales de las resistencias políticas y culturales de los pueblos originarios, si se puede hablar del fin del colonialismo, de la relación de las luchas indígenas con el cambio climático, de las resistencias.

“Hay un movimiento de luchadores sociales que intenta crear una unidad en los movimientos indígenas, creo que entre lo novedoso de este numero es que en lugar de llamar a antropólogos o especialistas en estos temas, de que sean colonos o mestizos, tratamos de ir a buscar a los indígenas y que ellos hablaran de sus territorios; que no fuera un blanco, una vez más, a hablar de ellos como objetos de estudio, sino ellos como protagonistas de sus propias luchas”, señala.

Esta edición, que se presentará mañana a las 19 horas en el Museo Nacional de Antropología, con los comentarios de Yásnaya Elena A. Gil, Hermann Bellinghausen, Antonio Saborit y Guadalupe Nettel, es un abordaje de las luchas indígenas a nivel continental, desde Alaska y hasta la Patagonia, un movimiento que habla del cambio climático, de la defensa de los ecosistemas, del respeto a la naturaleza y Tierra. “Se enlazan con muchos temas de interés y luchas distintas”, indica Nettel, quien asegura que muchos de los autores son luchadores sociales y activistas.

Tema coyuntural porque aparece el asunto del perdón. “Es un error pensar que es un agravio sucedido hace 500 años, creo que primero nosotros les tenemos que pedir perdón a los indígenas. ‘Yo, Guadalupe Nettel, colona, hija de colonos, mestiza, mexicana sí, pero que sigo de alguna manera, sin darme cuenta perpetrando miles de prácticas que siguen siendo colonialistas, que siguen marginando gente y siguen vejando gente’”.

A Nettel podría tocarle la celebración de los 90 años de la revista pero no piensa en ello.

“La revista está ahora bajo nuestro cargo, nos la confiaron, no es nuestra, en cualquier momento la Universidad puede decir que cambia de dirección y nos despediremos con mucho cariño...”

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