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La ex ministra de Cultura y Comunicación francesa Audrey Azoulay, de 45 años de edad, fue elegida ayer en París como directora de la UNESCO, anunció el presidente del Consejo Ejecutivo del organismo, Michael Worbs.
Audrey Azoulay ganó con 30 votos, dos más de los que obtuvo el ex ministro de Cultura qatarí, Hamad Bin Abdulaziz Al Kawari.
La nominación de la directora de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) se dio un día después de que Estados Unidos e Israel se retiraran al anunciar que el organismo tiene “un sesgo anti-israelí”.
Al respecto, Francia respondió que Azoulay era una candidata que pudo “superar las divisiones políticas en beneficio de las misiones esenciales de la UNESCO”. Y aboga por un nuevo objetivo, el de superar las profundas grietas políticas y generar confianza entre las naciones.
La directora electa se desempeñó desde 2014 como asesora cultural de François Hollande, periodo en el que diseñó un plan para proteger el patrimonio en peligro, y dos años después, en 2016, asumió un cargo en la cartera de Cultura, que abandonó para aspirar a la dirección del órgano de la ONU encargado del patrimonio cultural del mundo.
