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Por falta de una adecuada reglamentación de las empresas que se dedican a la subcontratación laboral (outsourcing), el gobierno deja de recaudar alrededor de 90% por concepto de impuestos, IMSS e Infonavit, informó Héctor Márquez, director Comercial y de Relaciones Institucionales y Gobierno de ManpowerGroup México y Centroamérica.

“Actualmente esta industria [de la subcontratación] aporta 10% de lo que se debería pagar, hay una cantidad enorme que el gobierno está dejando de recaudar por no reglamentar”, dijo el directivo durante la presentación del taller Tercerización de Personal.

Aunque las empresas de tercerización generan oportunidades laborales formales, acciones como la evasión fiscal impiden el desarrollo de esta industria, en la cual laboran 3.5 millones de trabajadores.

“La entrada económica que representa esta industria es lo suficientemente atractiva para que muchas empresas en el país busquen desempeñarse ofreciendo este servicio.

“Sin embargo, el desafío es eliminar los mecanismos ilegales con los que aún se opera, como ofrecer al empleador la posibilidad de reducir sus costos en perjuicio del empleado”, señaló Márquez.

En México son más de 2 mil empresas las que realizan esta actividad, pero sólo 40 cubren impuestos y de éstas 20 cumplen los estándares establecidos por la Asociación Mexicana de Capital Humano, permitiendo auditorías legales y fiscales.

Las empresas de outsourcing que realizan su actividad de manera correcta, registran a los trabajadores con el puesto, sueldo y prestaciones reales. Los pagos al trabajador son con recibos timbrados por el SAT. Las compañías irregulares registran a los trabajadores como socios de sindicatos o profesionistas independientes, y no con su sueldo real; además de que paga bajo otras modalidades, como puede ser por honorarios o por derechos de autor.

Las entidades con mayor número de trabajadores bajo el esquema de subcontratación son Ciudad de México, Estado de México, Nuevo León, Jalisco y Guanajuato. Representan 2.1 millones de empleados.

Entre los sectores económicos que concentran el mayor número de trabajadores subcontratados, destaca el comercio, con 34% del total; le sigue la industria manufacturera, con 26%, así como el servicios de hospedaje y restaurantes, con 8%.

Los retos. Sin freno a la irregularidad, son varios los retos que la industria enfrenta. El más preocupante es el perjuicio al trabajador y la competencia desleal. Además, sin una mayor verificación por parte de la empresa contratante, en el sentido de que el contratista no emplee a las personas con estrategias fiscales engañosas, esta industria no alcanzará el desarrollo necesario para atender con mejores prácticas al crecimiento mercado de trabajo, dijo Márquez.

Destacó que en México, durante la reforma a la Ley Federal del Trabajo en 2012, se incluyó la figura de tercerización en el artículo 15 A.

“Aun con ese cambio están pendientes acciones que permitan cerrar la pinza a las malas prácticas y la evasión fiscal”.

Al realizar su exposición sobre la situación del mercado, Márquez mencionó que la informalidad representa el mayor pendiente.

De acuerdo con datos del Inegi, hay estados que presentan una alta tasa de informalidad, como Oaxaca, con 80.4%, seguido de Guerrero y Chiapas, con más de 78% cada uno.

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