Las familias más ricas del mundo han sabido mantener su estrategia de inversión pese a los efectos adversos de la pandemia de e incluso obtener ganancias.

De acuerdo con el estudio “Global Family Office Report 2020”, realizado por UBS, este grupo de inversionistas, con recursos en promedio superiores a mil 600 millones de dólares , apostaron cuando los mercados bajaron en medio de la contingencia sanitaria.

“El gran dinero del mundo funciona casi de manera anticíclica. Estos family officers hacen grandes apuestan cuando los mercados bajan. Grandes cantidades de dinero comenzaron a ser invertidos cuando los mercados bajaban. Nuestros clientes saben cómo aprovechar las subidas y bajadas y tienen el apetito para invertir, incluso hasta para perder dinero cuando sus apuestas no son las correctas pero siempre lo hacen con la cabeza fría”, explicó el jefe de UBS de Global Family Office (GFO) de UBS para América Latina, Alejandro Vélez.

En términos generales, un family office se encarga de administrar y aumentar la riqueza de de una familia para las futuras generaciones. Así, el estudio de UBS cuenta con las opiniones de 120 de las familias más ricas del mundo.

Sin especificar detalles del mercado mexicano, el directivo de UBS explicó que tienen un comportamiento muy similar al resto de América Latina, que incluso es mucho más conservador en sus inversiones si se compara con un family office en Europa.

“Durante la crisis, el dinero de las grandes familias se movió masivamente y nosotros pudimos hacer miles de millones en préstamos para invertir en acciones públicas y conocidas. UBS está bien posicionado para ubicar a nuestros clientes más grandes y su fuerte balance nos privilegió ante clientes que no estaban dispuestos a tomar ese riesgo”, explicó Vélez.

El documento de UBS muestra que durante el primer trimestre de 2020, incluida la fase más intensa del mercado en marzo ante los efectos de la pandemia de Covid-19 , la reducción máxima promedio de las inversiones de las family office fue de 13%; sin embargo, se protegieron de los peores efectos al reequilibrar sus carteras para gestionar riesgos.

“Un 77% dijeron que sus carteras se han desempeñado en línea con, o por encima, de los objetivos de referencia respectivos durante el año hasta mayo. Más de la mitad, un 55% de las reequilibraron sus carteras en marzo, abril y mayo con el fin de mantener su asignación a largo plazo”, añade el documento.

En ese sentido, explica que dos terceras partes de las familias ricas entrevistadas estiman que su visión a medio plazo no ha cambiado, con lo que la mayoría busca hacer cambios tácticos en sus carteras en respuesta a los cambios macroeconómicos y de mercado.

“Tienen un fuerte apetito por el riesgo, y están aprovechando la dislocación del mercado para aprovechar las oportunidades de mayores retornos. Casi la mitad busca aumentar las asignaciones en bienes raíces y un número similar apunta a aumentar sus asignaciones en acciones de mercados desarrollados seguidas por las acciones de mercados emergentes. También han agregado a su efectivo y asignaciones de oro”, añadió.

maf

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