¿Cómo desaprovechar el tiempo?

Por Isis García 

Me pregunto cómo ocuparan el tiempo esas personas que se dedican a escribir artículos parecidos a este: “Los diez pasos para aprovechar mejor tu tiempo”, “Cinco ideas para no perder el tiempo”. ¿Serán máquinas productivas que en su tiempo libre respiran y comen?

Perder el tiempo es un concepto subjetivo. Estaba leyendo que tardas cuatro días y ocho horas para ver todas las temporadas de How I meet your mother. El mismo tiempo que Neil Amstrong y sus amigos ocuparon para llegar a la luna... Podrías estar en la luna, pero preferiste Netflix... O podrías pasar 11 días y 13 horas viendo Los Simpsons, y sí, los envidiosos creerán que perdiste el tiempo.

¿Estar en el trabajo todo el día es aprovechar el tiempo? De acuerdo con la OCDE México es el segundo país con jornadas laborales más largas, sólo después de Turquía. La mayoría de los mexicanos pasan más de 50 horas trabajando a la semana. La mala noticia es que hacer más de ocho horas nalga al día no es sinónimo de productividad. El rendimiento es decreciente. Es decir, conforme produces más la eficiencia es menor. Puedes producir tres cosas en tres horas; pero si sigues, podrías terminar produciendo cinco cosas en seis horas.

74 por ciento de los mexicanos no están satisfechos con su trabajo, entonces no son felices la mayor parte de su tiempo. ¿Las personas felices son más productivas? Google creció sus acciones 11 por ciento el trimestre de junio del año pasado y está rankeada por tener los empleados más felices del mundo.

Pero el trabajo no es sólo el tiempo hora nalga en la oficina. También cuenta el tiempo de transporte, ¿a ti cómo te va?, por lo menos aquí en la ciudad las personas viajan de norte a sur y viceversa todos los días. “Se hace un chilaquil” como dicen los viajantes. CTS EMBARQ México reveló que en 40 años de vida productiva un adulto pierde hasta 2.4 años atorado en el tráfico.

Los mexicanos trabajamos un promedio de 2,226 horas, mientras que en la mayoría de los países el promedio es de 1,765 horas de trabajo al año. Además de que no se refleja en mayor productividad, el aliciente tampoco está en el salario. En México el promedio de ingresos anuales es de 167 mil pesos mexicanos, contra los 311 mil pesos que ganan otros países.

Alguna vez, y especialmente en esta parte del año, intenté aprovechar mejor mi tiempo. Era la época en que intenté dejar de ser nini y ser un adulto “de verdad”. Decidí aceptar dos trabajos, a una hora y media de distancia el uno del otro, supe que requeriría de una gran organización para no fallar en el intento. Levantarme a las 7:30 todos los días para llegar al primer trabajo a las 9 en punto, salir a la 1 pm, comer en la cafetería hasta las 2 pm, tomar clases de danza de 2 a 3:30 pm, tiempo de transporte para leer en el camión y metro, 5 pm, hora de entrada al siguiente trabajo, salir entre 9 y 10 pm y llegar a mi casa a las 11 pm. Tiempo libre de 11 a 12 pm para meter la ropa a la lavadora, postear cosas en redes sociales o rascarme la panza.

Dormir a las 12 pm se convirtió en algo de suma importancia. Los desvelos me costaron días de recuperación. Tampoco podía darme el lujo de perder un segundo del trabajo en redes sociales, whastapp, o distracciones virtuales, porque llevarse trabajo a casa no era opción. El plan estaba a prueba de fallas si se seguía con disciplina militar.

Con el tiempo todo se empezó a volver un poco caótico, en mis trabajos empezaron a delegarme más responsabilidades, y ya sabes lo que dice el tío Ben “un gran poder conlleva una gran responsabilidad” y esas son las que quitan más tiempo. Con la ansiedad empecé a consumir más dulces, a no desmaquillarme por las noches, y otra cantidad considerable de malos hábitos que aprendí a eliminar por rachas de tiempo para que no se convirtieran en un problema serio, porque no tenía tiempo de enfermarme.

Paradójicamente, cuando salí de vacaciones en uno de mis trabajos y tenía más tiempo para mí, volví a conciliarme con ese bonito hábito familiar de “perder el tiempo”. No me hagas mucho caso, pero creo que la clave está en la organización.

¿ Y tú en qué vas a aprovechar tu tiempo este 2016?

Por Isis M. García Martínez
Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, UNAM. 
@IsisConVelo

Ilustrador. Elihu Shark-o Galaviz 
@elihumuro

ponteyolo@gmail.com