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La creatividad ha estado presente en todas las etapas de la civilización. Sin embargo, en el último siglo se ha incrementado a tal grado que han surgido grandes innovaciones tecnológicas que cambiaron la forma en la que vive la humanidad.

Algunos de los inventos más sobresalientes de la historia reciente fueron producto de mentes brillantes como Tim Berners-Lee (considerado padre de la web) o Steve Jobs (creador de las Mac y los iPhone), por solo mencionar algunos casos considerados ejemplares.

Así, varios de los inventos más notables en el mundo han provenido de diversas partes del orbe, como Estados Unidos, Asia y Europa, sobre todo a partir de la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, esto no significa que en otras regiones no se originen inventos útiles y con futuro prometedor, sino que las condiciones sociales en los diversos países no son las mismas.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (WIPO), los países que registraron más patentes en 2015 fueron: Estados Unidos (57, 385), Japón (44, 235), China (29, 846), Alemania (18, 072), República de Corea (14, 626), Francia (8, 476), Reino Unido (5, 313), Holanda (4, 357), Suiza (4, 280) y Suecia (3, 858).

La historia indica que México no se ha distinguido por ser un país que desarrolle masivamente un invento tras otro, a pesar de que sus pobladores poseen una capacidad inventiva notable. Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), nuestro país no ha podido desarrollarse en esta área al ritmo de otros países considerados emergentes, como Turquía, Sudáfrica o Brasil, debido a la falta de inversión en investigación y desarrollo.

No obstante, existen varias aportaciones mexicanas que han cautivado al mundo entero. Desde la televisión a color hasta el colisionador de adrones miniatura. Este día de patriotismo y orgullo nacional, te mostramos una recopilación sobre los inventos tecnológicos de origen mexicano más sobresalientes de los últimos años.

Bat-Gen (2010)

Bat-Gen es una batería creada por el oftalmólogo Arturo Solís Herrera, egresado de la UNAM. Su invento genera una carga de energía que dura hasta por cien años.

El artefacto, cuya patente pertenece al gobierno de Rusia, funciona mediante un sistema cíclico basado en la interacción entre una molécula de melanina, presente en el cabello, uñas, retina, piel, entre otras zonas del ser humano, y una de agua. Al entrar en contacto ambas moléculas, los átomos del agua se separan, como reacción al contacto con la melanina, generando una expulsión de energía que es aprovechada por la batería.

Este invento puede funcionar como un generador de energía o una batería, misma que pudiera adaptarse a gadgets o vehículos.

Rocket Belt (2005)

Juan Manuel Lozano Gallegos, científico egresado de la UNAM es el creador de la tercera generación del también llamado “cinturón volador” o “Jet Pack”, un artefacto que funciona a partir de tanques llenos con Peróxido de Hidrógeno, que al hacer combustión generan propulsión a chorro.

Con este invento se pueden realizar vuelos hasta por 34 segundos. Esta generación de Rocket Belt es mucho más ligera y compacta que sus antecesoras. El Rocket Belt apareció por primera vez en la década de los sesentas y tenía fines militares; lo fabricaba la empresa norteamericana Bell Aerosystems. La segunda generación vio la luz gracias al californiano Nelson Tyler y voló en la inauguración de los Juegos Olímpicos de Los Angeles en 1984.

Prótesis accesibles (2013)

Luis Armando Bravo Castillo, director general de Probionics, una empresa dedicada al diseño y desarrollo de órganos artificiales, creó la primera prótesis no invasiva fabricada en el país. Esta prótesis robótica interpreta las contracciones musculares en la piel del paciente para realizar movimientos. Su precio es considerablemente bajo, pues cuesta entre seis y trece veces menos que los productos fabricados en Europa o Estados Unidos.

El proyecto del ingeniero biónico, apoyado por el Conacyt pretende ayudar a aquellas personas que carezcan de alguna extremidad superior del cuerpo (mano, brazo y antebrazo) para que puedan recuperar movilidad y logren reincorporarse plenamente al ámbito social y laboral.

Acelerador de partículas miniatura más barato del mundo (2013)

Cristóbal Miguel García Jaime, estudiante de Física de la UNAM, ganó el Premio Nacional de la Juventud en la categoría de Ciencia y Tecnología por inventar el acelerador de partículas miniatura más barato del mundo.

Ocho meses, 23 días y 13 horas fue lo que tardó en construirlo y su presupuesto fue de mil pesos. La motivación de Cristóbal es divulgar la ciencia en las escuelas y demostrar que se pueden realizar desarrollos tecnológicos de calidad sin recurrir a grandes inversiones. De igual forma, lo que más le interesa al joven guerrerense es cambiar la realidad del país incentivando la creatividad de los jóvenes mexicanos.

Impresoras 3D Colibrí (2013)

Francisco Martín, Ricardo Madrigal y Juan Pablo González, ingenieros del Centro de Desarrollo InterLatin de Guadalajara crearon la primera impresora 3D mexicana de bajo costo, llamada Colibrí HOME. Este dispositivo de la marca Colibrí funciona con tecnología de filamento fundido, a partir de la cual se crean capas (sólidas o huecas) de rápido enfriamiento. Este invento pesa 13 kilogramos y tiene una dimensiones bastante ajustadas con respecto a sus competidoras (34.5 x 29.88 x 47.91 cm) y una área de impresión de 10 x 10 cm. La Colibrí HOME puede ser usada por cualquier tipo de público, a pesar de haber sido diseñada especialmente para satisfacer necesidades escolares y del hogar. Su precio es de 6 mil pesos.

Inferno Exotic Car (2015)

Es el primer automóvil 100% nacional fabricado por un grupo de ingenieros, diseñadores y científicos de México que reciben el apoyo de la empresa mexicana

LTM Hot Spot. Este superdeportivo tiene la distinción de estar manufacturado con materiales indeformables, a partir de una aleación de cinc, aluminio y plata que ha recibido el nombre de Metal Foam. Dicho material fue creado por el científico del Instituto Tecnológico de Monterrey, Said Robles Casolco y tiene la cualidad de estirarse hasta mil veces su tamaño sin deformarse.

A pesar de que el Inferno es una creación mexicana, su producción se realiza en Italia por industrias especializadas en la producción de vehículos.

GNOME (1997)

A finales del milenio pasado, Miguel de Icaza y Federico Mena inventaron una interfaz gráfica libre, intuitiva, atractiva, amigable y simple para GNU/Linux. El proyecto llevó el nombre de GNOME (GNU Network Object Model Environment) y surgió como una alternativa a los entornos gráficos de la época. Su recibimiento fue sumamente positivo, llegándose a convertir en uno de los softwares libres más descargados en América Latina.

Los entornos gráficos se basan en iconos, barras de tarea, ventanas, etcétera. A pesar de haber aparecido en el 97, fue hasta marzo de 1999 cuando se lanzó su primera versión estable. Tras 17 años de su invención, el software actualmente se encuentra en su versión 3.20 y se sostiene de donaciones.

Book on Demand (1977)

Book on Demand (Libro por pedido) es una tecnología fabricada y patentada en Estados Unidos, China y México por el inventor y escritor mexicano Victor Celorio. Instabook es el nombre de la empresa (también de Celorio) que trabaja con este invento, diseñado para “bajar”, imprimir y empastar un libro en poco tiempo.

Funciona por medio de una red digital de centros de impresión en la cual se dispone de 200 mil títulos sin derechos de autor para imprimirse al instante. El cliente puede determinar el formato, materiales y acabados de la obra de su interés.

Elaborar un libro de 200 páginas cuesta aproximadamente .75 dólares. Debido a este invento se ha catalogado a Victor Celorio como uno de los diez mejores inventores de Latinoamérica.

TV a color (1939)

El ingeniero Guillermo González Camarena fue un inventor mexicano considerado como pionero de la televisión a color. Dicha atribución se debe su invento llamado Sistema tricomático secuencial de campos, patentado en México y Estados Unidos. Este sistema funciona a partir de un disco giratorio acompañado de tres filtros (cada uno de ellos era de uno de los tres colores primarios: rojo, azul y verde), mismo que se hacía coincidir con tubos catódicos para compatibilizar el nuevo sistema con el anterior, denominado sistema monocromático (que transmitía en blanco y negro). El invento de González Camarena sirvió para ayudar a este medio a afianzarse en la sociedad de la época en la cual existía una hegemonía de la radio.

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