De nada sirve tener acceso a una vivienda, sino no se tiene acceso al espacio público, a la calle en el marco de una visión sustentable y segura, destacó la titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Rosario Robles Berlanga, quien afirmó que para ese objetivo se requiere una intervención integral, social, en donde no sólo participen los gobiernos locales y federal, sino que se les dé oportunidad a las familias.

Al participar en el cierre de actividades del Festival Internacional de Arquitectura y Ciudad Mextropoli 2016, Rosario Robles resaltó la importancia de rescatar los espacios públicos de la violencia, por lo que la Sedatu tiene el compromiso de construir ciudades seguras, incluyentes, sustentables y resilentes.

En el acto en donde estuvieron Sergio Fajardo, ex alcalde de Medellín, Colombia y aspirante a la Presidencia de ese país, así como Miquel Adriá, arquitecto impulsor de Mextrópoli, la titular de la Sedatu dijo que las mujeres viven la ciudad de manera diferente.

"Nos es más arrebatada la ciudad a nosotras, porque además de la inseguridad por la calle, el callejón oscuro, vivimos acoso sexual y la violencia tiene que ver con cuestión de género en la calle", por lo que insistió en garantizar la seguridad en las zonas urbanas y rurales.

"Esa violencia nos excluye, nos quita el derecho a la ciudad, nos mete a la casa, nos arrincona, a nosotras a nuestros hijos e hijas. Y atacar la violencia tiene que ver con este esquema de inclusión", reiteró.

Robles Berlanga recordó que es objetivo del gobierno del presidente Enrique Peña Nieto y obligación de la Sedatu, poner en el centro el derecho a la ciudad, independientemente del género, color o capacidad de las personas.

Destacó la importancia de revertir la desigualdad que hay en las ciudades mexicanas.

El 60% de la pobreza urbana está en las ciudades, indicó Robles, quien señaló que antes se decía que la pobreza estaba en las zonas rurales y de ahí migraban a las urbanas, pero esto se ha ido transformando y datos recientes hablan de la pobreza urbana, que refleja profunda desigualdad.

Sergio Fajardo recordó que en Medellín se tuvo violencia por mucho tiempo, la cual transformó la vida de los habitantes de esa ciudad, pues ese fenómeno se traduce en miedo y este último fragmenta, divide, rompe vínculos entre las personas ·y eso significa: sálvese quien pueda".

Por ello emprendió una estrategia para recuperar la dignidad, rompiendo el miedo y con la construcción del espacio público en donde se privilegió "lo más bello para los más humildes".

Con alguna forma de educación, dijo, se desarrolló la capacidad de lo público, para demostrar que se puede construir en un marco en donde los recursos vienen de toda la comunidad, por lo que de ahí se recuperó la confianza y se hizo una forma de enfrentar la desigualdad.

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