La vida no es linda con enemigos, dice Papa a niños en Morelia

El Papa Francisco se reunió de manera improvisada con unos 600 niños de distintos lugares de la diócesis, en la Catedral de Morelia.

En su encuentro, les pidió valorar a los amigos y les dio la bendición. Además, les pidió no dejarse pisotear y desarrollar su creatividad.

“Muchas gracias por la visita, y le voy a pedir a Jesús que los haga crecer con mucho amor, con mucho amor, como tenía él, con mucho amor para ser cristianos en serio, para cumplir el mandamiento que Jesús nos dio: Amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como Jesús nos amó, como nosotros mismos y más como Él nos amó.

“Y vamos a pedirle al Virgen que nos cuide, que nos bendiga. Cada uno de ustedes ahora piense en su corazón en la familia que tienen y en los amigos, y si están peleados con alguno, también piensen por él.

"También le vamos a pedir que la Virgen los cuide, es una manera de haciéndonos amigos y no tantos enemigos", les dijo.

“Porque la vida no es linda con enemigos, y el que hace los verdaderos amigos es Dios en nuestro corazón.

“Entonces en silencio pensamos en la familia, en nuestros amigos, en aquellos con quienes estamos peleados, para que  Dios los bendiga, y por todas las personas que nos ayudan: las monjas, los curas, los profesores, la escuela, todos los que nos están ayudando a crecer”.

Francisco les pidió cerrar los ojos alzar una bendición especial para papá, mamá y los abuelos.

El Pontífice salió de la Catedral de Morelia en compañía del arzobispo de Morelia, cardenal Alberto Suárez Inda, y se detuvo en el atrio para escuchar a la orquesta y el Coro de Infantes de ese templo.

Al terminar la canción, se acercó para que le tomaran una fotografía con el coro, a cuyos integrantes les invitó a seguir siendo creativos, a buscar la belleza y “las cosas lindas que duran toda la vida ”.

Ante un grupo de jovencitas que interpretó una melodía para el Pontífice, les dijo que nunca se dejaran pisotear por nadie.

Enseguida les dio la bendición y les pidió que de vez en cuando le canten alguna “canción, aunque estén lejos”.

En la puerta de la Catedral, el alcalde de Morelia le entregó las llaves de la ciudad.