El rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), José Narro Robles, se pronunció por la defensa y fortalecimiento de la soberanía de las universidades públicas, pues consideró que sin este principio “estamos disminuidos”.

Con esa característica, insistió, “servimos mejor a nuestra sociedad. Por ello, nunca claudicaremos en su defensa, por ello haremos todo lo necesario para fortalecerla”, reiteró.

Durante la ceremonia de entrega del reconocimiento Autonomía Universitaria a ocho personajes de la historia de esa institución como a Guillermo Soberón, así como a Javier Barros Sierra, cuyo hijo, Javier Barros Valero, recibió en su nombre la medalla conmemorativa por los 100 años del natalicio de su padre, José Narro expuso que la “autonomía implica la transparencia en el uso de los recursos que aporta la nación, pero también la exigencia de calidad en el desarrollo y cumplimiento de las tareas sustantivas”.

Dijo que la “autonomía permite a las instituciones contar con procesos de decisión institucional más ágiles, con mayor flexibilidad para adaptarse a las necesidades y demandas sociales al margen de intereses de cualquier tipo”.

“La autonomía hace posible la pluralidad que caracteriza a las universidades públicas mexicanas, pluralidad que nos brinda la riqueza de contar con ideas distintas, con los modos diversos de ver la vida y la sociedad”, declaró.

“Con profesiones diferentes y métodos diversos encaminados a la misma función, a la búsqueda de la verdad, de la justicia y de la belleza”, dijo.

Con esas premisas destacó que “a los aquí reunidos nos une un conjunto de valores, se trata de valores cívicos que deben fincarse en nuestra sociedad: la honestidad, la solidaridad, lealtad, el trabajo, estudio, la unidad, el compromiso por la libertad, la paz y la democracia. La lucha en contra del autoritarismo, la desigualdad, la violencia, la corrupción y la impunidad”.

En la entrega de galardones, entregados por primera vez en un acto efectuado en el Teatro Juan Ruiz de Alarcón del Centro Cultural de Ciudad Universitaria, se otorgó el citado reconocimiento a las universidades Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, Universidad Autónoma de Sinaloa y Universidad Autónoma de San Luis Potosí.

Los personajes homenajeados post mortem fueron Justo Sierra, y el reconocimiento fue recibido por su bisnieto, Manuel Peimbert Sierra; a Alejandro Gómez Arias, entregado a su sobrino Enrique García, y a José María de los Reyes, dado a su hija, Sara de los Reyes de Suárez; a Ignacio García Tellez, otorgado a su hijo Ignacio García Téllez Madrazo.

Además, a Manuel Gómez Morín, recibido por su nieta Alejandra Gómez Morín Fuentes; a Ignacio Chávez Sánchez, entregado a su nieto, Ignacio Chávez de la Lama; a Javier Barros Sierra, que fue dado a su hijo Javier Barros Valero y a Guillermo Soberón Acevedo.

Este último, quien habló a nombre de los homenajeados, y Javier Barros Valero, quien recibió la referida medalla conmemorativa, destacaron la importancia de quienes han contribuido a mantener la autonomía de la UNAM a pesar de las adversidades que se han presentado durante su historia.

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