justiciaysociedad@eluniversal.com.mx

San Cristóbal de las Casas, Chis. — La apertura del gobierno federal y del Congreso de la Unión para atender las demandas de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), “es clave” para avanzar en lo que los maestros consideran justo, pero esta disposición debe ser de ambas partes que están sentadas en la mesa para evitar choque y enfrentamientos, consideró el obispo Felipe Arizmendi Esquivel.

En su mensaje dominical, se congratuló que se haya abierto otra vía de atención de los maestros, como fue la Comisión Permanente del Senado, puesto que fueron los legisladores los que aprobaron la reforma.

Consideró que la propuesta ciudadana para elaborar una nueva reforma educativa, no debería ser rechazada, porque así lo contempla el marco legal: que el pueblo proponga cambios legislativos.

Esto sería “un paso significativo y eficiente”, por lo que es el momento de “elaborar una propuesta de reforma educativa que sea integral, no solo laboral y administrativa.

“Es importante que continúen las mesas de diálogo para analizar los aspectos políticos, educativos y sociales”, pidió el obispo.

Agregó que si se hace la revisión a la reforma es para hacerle cambios “que sean necesarios”.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses