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rebeca.jimenez@eluniversal.com.mx
Naucalpan, Méx.— Protección Civil municipal determinó el cierre de la plaza comercial Mártires de Río Blanco y el desalojo de dos vecindades, luego del desgajamiento de un talud.
Después de la tormenta registrada el viernes por la tarde, se registró un derrumbe en un enorme muro, que afectó tanto a la colonia San José de Los Leones, ubicada en la parte superior, como a la plaza comercial, ubicada en la parte baja de esta zona, en la colonia Mártires de Río Blanco.
La caída de tierra y piedras, y el estruendo que generó el percance provocó pánico no solamente entre los habitantes de la calle San Antonio, cuyas viviendas quedaron fracturadas, sino además entre clientes y personal de la plaza comercial.
Viviendas ubicadas en la parte de arriba en San José de Los Leones, quedaron “volando”, luego del deslave sobre la plaza comercial donde Protección Civil determinó el cierre de un complejo de cines, bodega Aurrerá y demás locales comerciales.
La plaza comercial de la colonia Mártires de Río Blanco quedó preservada por personal de Protección Civil ante el riesgo de nuevos deslaves, como el que se registró el viernes 19 por la tarde noche.
Autoridades municipales informaron que elementos de Protección Civil además iniciaron un procedimiento para deslindar de responsabilidades sobre las causas del deslave, luego de que trabajadores de la construcción de la plaza realizaron movimientos de tierra.
Evacúan a familias. En tanto, debido al riesgo inminente de desplome, Protección Civil y Bomberos llevaron a cabo la evacuación de dos predios en los cuales habitan 25 personas, en la colonia San José de Los Leones, la cual se encuentra en la parte de arriba de la plaza comercial.
Las familias desalojadas, optaron por quedarse a vivir con familiares y vecinos, luego de que sus viviendas quedaron “al aire”, es decir, despojadas de parte de sus cimientos debido a los deslaves provocados por las precipitaciones.
Además de que Protección Civil determinó que habitantes no podían habitar esa zona ante el riesgo de un posible derrumbe.
En guardia permanente. Debido al percance provocado por las fuertes lluvias, paramédicos y ambulancias de Protección Civil, equipados con material de atención pre hospitalaria, permanecen en el sitio de los hechos en guardia permanente junto a bomberos, ante el riesgo de nuevos desgajamientos en el lugar.
Además, personal del Sistema de Desarrollo Infantil (DIF) brinda atención a aquella población que resultó afectada, en esta zona ubicada sobre y bajo taludes.
La ocupación de barrancas y taludes, característicos de la geografía de Naucalpan y Huixquilucan, especialmente en época de lluvias, hacen frecuente el registro de deslaves y derrumbes, que han dejado familias enteras sepultadas bajo toneladas de tierra, por el reblandecimiento de suelos y muros.
Colonias como San José de Los Leones, Mártires de Río Blanco, San Lorenzo Totolinga, San Rafael Chamapa y Minas Coyote, son sólo algunas colonias que han registrado deslaves con familias atrapadas.
