Historia y modernidad convergen en Monterrey

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El municipio de Monterrey, Nuevo León, es la tercera ciudad más grande del norte de México y tiene una amplia gama de atractivos turísticos, donde convergen historia y modernidad.

Monterrey, al contrario de lo que se piensa, no fue construido en tierra árida, la ciudad fue cimentada en una tierra fértil, alimentada por los pozos de Santa Lucía. Cuenta con dos estadios para sus principales equipos de fútbol: los Tigres y los Rayados.

Tan sólo en la Macroplaza, también conocida como la Plaza Zaragoza, se puede disfrutar de un sin fin de actividades, entre las cuales destacan tres museos. Al oriente del palacio de gobierno se encuentra el Museo de Historia Mexicana, el cual presenta la historia de la República Mexicana a través de sus diversas salas.

El paseo Santa Lucía, un canal de agua de dos kilómetros de longitud, cuenta com un andador peatonal en el que se puede caminar disfrutando de murales pintados por diversos artistas regiomontanos o tomar una embarcación para recorrer el canal.

También es la vía que conecta el Museo de Historia Mexicana y el Museo del Noroeste,  el cual muestra la historia regional de los estados, del noreste de la República, así como el sureste de Estados Unidos.

Otro museo es el de Arte Contemporáneo, que tiene un gran acervo de obras de reconocidos artistas como Leonora Carrington, Siqueiros y por supuesto, la paloma de Juan Soriano, quien es la encargada de recibir al público que visita el recinto.

En la Macroplaza se encuentra la fuente Neptuno, una figura escultórica ejecutada por el artista español Luis Sanguino, en la que se aprecian ocho figuras de bronce que son guiadas por Neptuno, que a pesar de ser un dios mitológico, en el municipio representa la culminación de acueducto proveniente de la presa Cerro Prieto, misma que terminó con la sequía en Nuevo León.

El municipio es reconocido por su gastronomía, en la que destacan los sabores de los frijoles charros, los tacos de trompo, y por supuesto, el cabrito que se puede degustar en El Rey del Cabrito; parada obligada para quienes visitan la ciudad.

“El que no viene al Rey no viene a Monterrey”, dice Guadalupe, uno de los trabajadores del lugar.

Al restaurante  han asistido famosos como Juan Gabriel, Lola Beltrán y Jenny Rivera, el dueño Jesús Alberto Martínez se ha hecho gran amigo de varios artistas y tiene fotos de ellos como decoración del establecimiento.

La ciudad regia nos invita a conocer su gastronomía, su historia, su clima y su gente, aprovechando al máximo tanto sus riquezas culturales como naturales que siempre son un deleite para los turistas.