La regidora de Morena en el ayuntamiento de San Cristóbal de las Casas, Jerónima Toledo Villalobos, pidió que se investigue una querella por presunto acoso sexual interpuesta por una empleada municipal en contra del secretario técnico del ayuntamiento, Sergio Natarén Gutiérrez, y de Romeo Cancino González, hermano del alcalde Marco Antonio Cancino González (PVEM).

La regidora del Partido Morena dijo que Sandra “N” la acusó al igual que a su compañero regidor del mismo partido, Carlos Herrera, de haberla presionado para que procediera jurídicamente contra los dos supuestos acosadores. “Lamento que Sandra haya tomado esa decisión, pero supongo que está amenazada, presionada y corre peligro”, advirtió.

En rueda de prensa, precisó que conoció a Sandra el 12 de octubre, cinco días después de que ésta acudió al agente del Ministerio Público a interponer el recurso legal. Ese día informó en la sesión de cabildo que la mujer había interpuesto la querella por acoso sexual en contra de Cancino y de Natarén, días después de que fue despedida de su trabajo.

La regidora sostuvo que la querella se la proporcionó directamente Sandra. La presunta agraviada le dijo que temía alguna reacción de los acusados en su contra. “Es un asunto muy serio. Conocí a Sandra, madre soltera de dos niños, una hora antes de la sesión, según consta en los mensajes por Whatsapp que intercambiamos”, detalló.

La regidora destacó que esa ocasión la mujer le dijo que estaba muy asustada, que tenía dos hijos que sustentar y que su afán era permanecer en su trabajo. Que tenía miedo de sus acosadores. Entonces, agregó Toledo Villalobos, se le sugirió que no acudiera a la sesión de cabildo, a fin de proteger su integridad, ya que como miembro de la Comisión de Equidad de Género, es mi obligación proteger a las mujeres, argumentó.

Durante la sesión, explicó, propuso que en tanto durara el proceso legal se separara del cargo a Natarén Gutiérrez, y “le pregunté al alcalde Marco Antonio Cancino sobre “cuál es el cargo formal que tiene su hermano Romero, porque afecta la imagen del Ayuntamiento, pero no respondió”.

Aunque, dijo que a los pocos días, probablemente “presionada y amenazada por Romeo Cancino y Sergio Natarén”, Sandra acudió al noticiero de una estación de radio no concesionada y afirmó  que  fue  ella y Carlos Herrera quienes la presionaron para que interpusiera la demanda penal”. A Sandra no la conocía, sino hasta una hora antes de la sesión del cabildo. Sólo le brindé el apoyo, subrayó la regidora de Morena.

Lo más importante, dijo, es investigar el asunto ya que existe una querella interpuesta por Sandra, el 7 de octubre, y si no son ciertas sus declaraciones incurrió en falsedad. Ella no puede señalar que yo le insistí para que hiciera la demanda porque nos conocimos cinco días después, argumentó.

Reiteró su apoyo solidario a la supuesta ofendida, pero sostuvo que el caso es utilizado por las autoridades municipales como distractor a los problemas locales. Lo que pido es que se haga justicia y que se llegue hasta las últimas consecuencias. “A mí no me intimidan y le daré seguimiento al caso”, aseguró Jerónima Toledo.

spb/ml

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