Chihuahua.— El gobierno del estado procederá penalmente contra un grupo de choferes del transporte público que ayer bloquearon las principales avenidas de la ciudad, en protesta por la falta de pago de salarios, de lo cual responsabilizaron a la administración estatal por ser la que administra el rubro en la capital.

Al respecto, el mandatario estatal panista, Javier Corral, dijo que el gobierno no tiene ninguna obligación de pagar sueldos a los choferes, que eso compete a quienes operan las concesiones de las rutas. El funcionario calificó de “chantaje” el bloqueo, y un abuso contra la ciudadanía.

“Nosotros no vamos a pagar, y menos la sociedad chihuahuense, por este esquema donde unos consintieron la corrupción de otros”, dijo el gobernador, quien expresó que se identificaron salidas de recursos para la compra de refacciones, llantas y combustible sin ninguna regulación.

La protesta consistió en cerrar diversas avenidas, las de mayor de tránsito, y plantarse frente al Palacio de Gobierno. Las vialidades sólo permanecieron cerradas por unas horas, pero pretendían reanudar los bloqueos a primera hora del miércoles, mientras que el plantón en la sede gubernamental estaba anunciado como permanente.

“No nos van a tratar igual que a [César] Duarte”, señaló Corral en alusión a que en el último año de gobierno de su antecesor se registraron ocho paros de transportistas, lo que provocó severas complicaciones a los chihuahuenses en materia de movilidad.

Los choferes habían anunciado que permanecerían de forma indefinida en el bloqueo, pero durante la madrugada agentes estatales los retiraron por la fuerza y los camiones fueron llevados con grúa. Incluso, un transportista que se oponía a dejar el plantón fue detenido. A la par, elementos policiacos se apostaron en las dos terminales de transporte para evitar que los inconformes ingresaran de nueva cuenta.

El conflicto tuvo su origen hace tres años, cuando el gobierno anterior puso en funcionamiento la empresa CTU para que administrara el transporte en la ciudad, y a la vez arrancó el sistema ViveBus, que es una ruta central que atraviesa la capital de sur a norte.

La Coordinadora de Transporte Colectivo, que opera el ViveBus, se declaró en quiebra, y se les deben salarios y prestaciones sociales a los choferes y personal administrativo, debido a que hubo desvío de recursos del pasaje y la administración no entregó los pagos a los concesionarios.

Corral adelantó que se hará una reestructura de todo el sistema de transporte y que se fincarán cargos a quienes participaron en los bloqueos.

“Vamos a recuperar el control del transporte en nuestra ciudad, lo haremos primero recuperando, por supuesto, el órgano encargado del sistema, no vamos a ceder al chantaje, la presión o intimidación, mucho menos cuando se coloca en medio la vulneración de derechos de la sociedad chihuahuense a su libre tránsito”, dijo.

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