Kristyan Ferrer, un actor exitoso que fracasa como basurero

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Kristyan Ferrer, protagonista de Gutentag Ramón, comprobó que en la colonia Santa María la Ribera, en la Ciudad de México, los vecinos no dan dinero a los recolectores de basura. Un día, durante cinco horas, el actor se subió a un camión con esa tarea, pensando en la preparación de la cinta que filma.

En Extraño, pero verdadero, dirigida por Michel Lipkes (Malaventura), Ferrer es part e de un grupo de basureros que encuentra un cadáver y se pelean por el dinero encontrado en sus bolsillos. “Es impresionante esto, es toda una cultura (la recolección), ellos son voluntarios y sólo ganan lo que la gente da, llegan a tener 800 pesos, pero deben dividirlos entre siete personas tras jornada muy duras”, detalla.

“Cuando me subí nadie supo que yo era actor, literal metía las manos en la ca..., y en esa colonia no dan nada”, bromea el actor.

Extraño, pero verdadero está basado en hecho reales. Todo comenzó cuando el realizador Lipkes se encontraba haciendo un documental en el Bordo de Xochiaca, en Nezahualcóyotl, estado de México, y encontró un muerto.

Durante días no pudo dormir y debió pedir ayuda psicológica.

Entonces pensó escribir una película y comenzó a entrevistar a trabajadores de limpieza quienes coincidían en haber encontrado en varias ocasiones partes humanas. “Y es real”, recalca Ferrer tras su experiencia fugaz en el carro recolector, “todos han tenido contactos con restos humanos”.

El histrión es una de las figuras jóvenes del cine nacional. Ha participado en las cintas Sin nombre, El infierno, Guten tag Ramón y Días de gracia, siendo nominado al premio Ariel por las dos últimas. Para 2016 espera el lanzamiento de Moronga, donde se vistió de mujer y La habitación.