A callar por siempre ese: “Dos a cero”

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Empezó como un murmullo hasta que se convirtió en un cántico que se volvió clásico:

“Dos a cero” explota la tribuna estadounidense, cada vez que cerca del final del partido, y su selección vence, por ese marcador al equipo nacional mexicano.

Esto ya se ha vuelto una costumbre, ya que de las 18 derrotas que tiene el Tri históricamente frente a Estados Unidos, nueve han sido por esa diferencia, comenzado a contar desde 1990.

La frustración de los jugadores, cuerpo técnico y afición mexicana ha sido evidente a través de los años, el perder contra el odiado vecino es imperdonable, y más por ese marcador, el cual se volvió una maldición.

“Claro que dolía, nos ardía que nos hicieran sus cánticos, a nadie le gusta eso, pero más que no se les pueda ganar como se hacía antes”, confiesa Oswaldo Sánchez, portero emblemático de la Selección por más de 10 años que acumuló algunas derrotas, “pero también muchas victorias”, ante el enemigo principal de la Concacaf.

“Me tocó ganarles muchos partidos y perder también, no lo voy a negar, eso volvió a este juego un Clásico, el Clásico del área y por eso el partido que viene [por el pase a Confederaciones] es tan importante”.

De los nueve juegos en los que se ha caído ante los estadounidenses, Oswaldo fue titular en tres, tres dolorosos tropiezos. “Lo del marcador es una coincidencia, pero las caídas que más han dañado, supongo, que han sido las de eliminatoria y claro, la de la Copa del Mundo de Corea-Japón”, en 2002.

Mas también han existido momentos positivos. “Como aquel triunfo con gol de [Jared] Borgetti en el debut de [Javier] Aguirre o muchísimas victorias que hemos tenido en su casa, en varias finales”.

Factor en estos juegos fue el hoy retirado Landon Donovan.

El llamado ‘Capitán América’ fue verdugo de los mexicanos durante toda su estancia en el equipo de las barras y las estrellas. En estos nueve juegos ganados por 2-0, anotó cuatro goles.

—¿El que Donovan marcara, hacía más dolorosa la derrota? se le pregunta a Oswaldo.

“A mí no. A mí me dolía que cualquier delantero me anotara, y más me dolía perder. Sí, a Landon le tocó anotar mucho, pero bueno, nunca hubo nada personal contra él, ni contra nadie”.

Claudio Suárez también fue otro protagonista de aquellas derrotas, por aquel marcador.

“Pues nosotros no nos fijábamos por cuánto perdíamos, sino en que al final salíamos derrotados”, recuerda el hombre que más veces ha vestido la casaca nacional con 177 apariciones.

Carlos Hermosillo asegura que las derrotas que han sucedido desde 1991, “no son coincidencia, ellos han crecido mucho. No les voy a quitar méritos, en ese juego de la Copa de Oro nos ganaron bien y comenzaron una racha que nos duele, se quiera ver o no”.

Los ex seleccionados, ex mundialistas, esperan que en este partido, a celebrarse en Pasadena. California, ”sea una nueva oportunidad para que en una cancha de su país, los dejemos fuera y de alguna manera cobrarnos todas esas veces que se ha perdido…”, espera Oswaldo.

Y lo mejor es que si hay una victoria, ese murmullo que se volvió cántico, no se volverá a escuchar.

Porque la meta de este equipo nacional mexicano es que el marcador: Dos a cero en contra, no se vuelva a escuchar... jamás.