Están presentes en todas las prendas de moda, pero solo algunas de ellas logran estimular el tacto y la vista. Las texturas son tan importantes para la industria de la confección que suelen recibir una gran importancia al momento de la creación y en muchas ocasiones el material dicta la forma en que una prenda se puede construir. En la temporada otoño/invierno pueden lucirse más, pues son ideales para resaltarse en abrigos, chamarras, suéteres y otras piezas.


En general, el término "textura" se refiere a la superficie de un objeto. Sin embargo, en moda esta definición también incluye el método en el que se teje una prenda —en caso de estar fabricada en tela— para que logre un efecto especial. Por ejemplo, la lana se puede transformar en un tejido de bouclé, crepé o tweed, por nombrar algunos, pero la sensación al tacto y las cualidades de cada uno son muy diferentes. Cuando los materiales son de origen animal, como el cuero o la piel, la forma en la que éstas se trabajan también suele variar.


Las texturas están en todos lados, pero si alguna vez has temido jugar con ellas, te ofrecemos una breve serie de consejos para mezclarlas sin ningún problema.


MATERIALES


Lentejuelas 


La forma más sencilla de lograrlo es contrastarla en cortes y materiales. Por ejemplo, si tienes una falda lápiz o vestido a la  rodilla, combínalo con un suéter de tejido grueso, como el que mostramos en la foto, una camisa de manga larga o un t-shirt en un color discreto. También puedes llevar un look monocromático y avivarlo con un par de sandalias o un bolso con aplicaciones.


Bouclé 


Esta temporada se está llevando en piezas inspiradas en la moda casual, como minifaldas o abrigos con capucha. Si elegiste una statement piece como un abrigo o una chamarra, deja que mantenga su protagonismo y llévala con piezas casuales como un suéter delgado y unos jeans.


Metálicos


La clave es nunca opacar el brillo. ¿Tienes unos skinny jeans plateados que te gustan? Llévalos con una sudadera, chamarra de cuero o abrigo oversized en un tono mate. Si es una falda, chamarra o vestido, elige básicos en blanco, negro o gris para potenciar el impacto.


Estampados

 
Existen varias opciones en el mercado, pero en esta ocasión nos centraremos en el animal print y los estampados XL. En ambos casos, la mejor solución es elegir piezas en una misma familia cromática. Por ejemplo, mezcla un abrigo de leopardo con un vestido beige o negro o una gabardina de cuero con un vestido con prints.


Mezclilla con aplicaciones 


Ésta es la más casual de tus opciones y se divide en diferentes categorías, como bordados, parches o estoperoles. La mejor opción que tienes es balancearlo con una pieza de estilo simple, como un blazer negro, o que corresponda con el esquema cromático de la aplicación más llamativa. Otra opción disponible para ti es usar otra pieza de mezclilla en el mismo tono, para que, a través de la uniformidad del color, los detalles resalten.


Ante


Te recomendamos avivarlo con accesorios llamativos, como un par de botines en charol o un bolso metalizado. Opta también por tejido de punto y abrigos oversized.


CRÉDITOS
    Modelo: AFRA PARA PARAGON MODEL MANAGEMENT | Maquillaje y peinado: ADISSON ÁLVAREZ | Coordinación de moda: GINA ORTEGA | Producción: ALAN CARRANZA

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses