Plantean una oficina que vigile presupuesto

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Ante la alerta que lanzaron calificadoras de valores por el incremento de la deuda pública, diversas organizaciones de la sociedad civil agrupadas en el Colectivo por un Presupuesto Sostenible (Peso), van a proponer la creación de una oficina parlamentaria de presupuesto conocidas en el mundo como consejo fiscal que estará a cargo del Poder Legislativo.

Se trata de contar con una figura como la que opera en más de 27 países como la poderosa oficina presupuestaria del Congreso de Estados Unidos, que puede surgir de la fusión del Centrode Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados y del Instituto Belisario Domínguez del Senado.

La propuesta se va a presentar durante el foro internacional El Poder Legislativo y su rol frente al proceso presupuestario, encuentro que se lleva a cabo hoy y mañana en la sede del Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública (CESOP) de la Cámara de Diputados.

Para el Colectivo Peso, México cuenta con áreas de oportunidad para mejorar la capacidad técnica del Poder Legislativo para participar en el diseño de política fiscal y por eso propone que el Poder Legislativo cuente con un consejo fiscal bicameral autónomo enfocado en materia presupuestaria, que realice estimaciones propias para la formulación del presupuesto y el costeo de implementación de leyes, y que estás sean técnicamente independientes de las políticas públicas.

Se necesita que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) transparente la metodología que utiliza para establecer el presupuesto, así como asegurar la independencia técnica y de gestión del consejo fiscal mexicano, el cual requiere de un Consejo Directivo con perfil académico que esté especializado en materia de finanzas públicas y que cuente con periodos de gestión que trasciendan las legislaturas en turno.

Mecanismo eficaz. Al respecto, el Instituto Belisario Domínguez advirtió que para mantener la sostenibilidad de las finanzas públicas en el mediano y largo plazos es indispensable un adecuado manejo de la deuda pública, cuyo aumento, sólo debe responder a financiar gasto productivo en épocas de desaceleración económica para contener los diferentes efectos adversos.

Los consejos fiscales u oficina parlamentaria de presupuesto son un mecanismo eficaz para lograr un desempeño disciplinado en política fiscal, además de permitir la generación de mayor transparencia sobre el manejo de recursos públicos, afirmó.

Representan una alternativa institucional para fortalecer el desempeño y sostenibilidad de las finanzas públicas.

En el caso de México, ponderó que la consolidación de un consejo fiscal autónomo, que realice las funciones documentadas en otros países contribuye a fortalecer el contexto hacendario.

Recomendó que su diseño debe tomar en cuenta las experiencias internacionales para dotarlo las herramientas que le permitan generar credibilidad pública e impacto en la toma de decisiones fiscales.