El portavoz del Departamento de Estado, John Kirby, afirmó hoy que el informe corrobora la declaración hecha después de la tragedia por el secretario de Estado, John Kerry, quien aseguró que el avión fue derribado por un misil BUK "disparado desde territorio en el este de Ucrania controlado por separatistas con apoyo ruso"

Investigación amparada en simulación concluye que los daños que presenta el fuselaje del avión no corresponden un misil Buk moderno, aunque la empresa reconoce que pudo ser un modelo antiguo que se importaba a Ucrania en 1986