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A finales de la década de los 70, Julio Sánchez Reynoza se unió al Ejército Sandinista que puso fin a la dictadora de la familia Somoza en Nicaragua. Lo hizo como correo humano del Frente de Liberación que derrocó a Anastasio Somoza Debayle.
Desde aquellos años, Sánchez Reynoza —promesa en el beisbol— entendió que parte del sentido de su vida era entregarse a su patria, que mantiene hoy con 62 años de edad al ser el manager del equipo que participa en los Juegos Centroamericanos y del Caribe así como segundo jefe de la dirección de Seguridad Pública Nacional de Nicaragua.
La novena nicaragüense fue derrotada ayer por cuarta ocasión en el certamen al que arribó como medallista de plata en Veracruz 2014. El responsable de equipo, señala que los problemas sociales en su país, no permitieron realizar una preparación para defender la presea.
“Nuestro país está viviendo una situación social muy complicada. La selección la preparamos de forma muy rápida, nuestro gobierno hizo un gran esfuerzo para que Nicaragua estuviera en 18 deportes, porque no podíamos fallarle a los colombianos. Teníamos que estar presente, tuvimos limitaciones, pero nuestro equipo siempre tuvo mucho patriotismo”, declaró.
El sábado pasado, una multitud protestó en Managua por la aprobación de la reforma legal que castiga con 15 a 20 años de prisión el terrorismo, cargos de los que han sido acusados en las más recientes semanas, los opositores del presidente Daniel Ortega, quien está en su tercer periodo de mandato.
En tres meses de manifestaciones en Nicaragua, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha contabilizado casi 300 muertos, varios de ellos estudiantes que reprueban las acciones de Ortega, quien acumula 11 años en la presidencia.
“Todas las sociedades en todos los países del mundo hay situaciones [protestas], es normal: Estados Unidos, Colombia, Guatemala, los ciudadanos tienen derecho a protestar, eso es algo ineludible en libertad. Eso no es lo que molesta. Lo que pasa es que las noticias no dicen las cosas como son. Cada uno tiene la verdad, pero la única verdad la tiene Dios, yo te puedo decir una cosa y la otra persona otra, pero sólo Dios juzgará”.
Para el manager nicaragüense, las protestas no pueden ser justificadas por el gobierno cuando se viola la paz de los ciudadanos. Dentro de los 300 muertos que se registran en tres meses, varios son policías.
“Todos tenemos la libertad de acción, pero sin perjudicar a nadie, molestar, lesionar ni matar a nadie. En ninguna parte del mundo se tiene problemas si las cosas se realizan pacíficamente”.
Julio Sánchez Reynoza regresa a su país para quitarse el uniforme de mánager y ponerse el de policía para seguir “sirviendo a su patria”.
ariel.velazquez@eluniversal.com.mx
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