Cuando la calidad del aire es mala, se recomienda a la población, especialmente niños, adultos mayores, personas con intensa actividad física o con enfermedades respiratorias y cardiovasculares, limitar los esfuerzos prolongados al aire libre

A los habitantes de esos sitios, particularmente grupos vulnerables y personas con enfermedades respiratorias y cardíacas, se les recomienda no realizar actividades en exteriores para evitar daños en el sistema respiratorio